Chile y México siguen celebrando los Oscar
Ambos países plantaron bandera en una entrega que tuvo a América latina con un rol sumamente protagónico. Las repercusiones por la consagración de “La forma del agua”, “Una mujer fantástica” y “Coco”.
En una de las ceremonias más aburridas de los últimos años, los premios Oscar tuvieron un impacto especial en América latina. Los galardones otorgados a La forma del agua como mejor película y a Guillermo del Toro como mejor director resumieron el impacto de cineastas y de artistas de toda la región en una industria norteamericana que se mostró abierta e inclusiva.
“Soy un inmigrante. Como Alfonso (Cuarón) y Alejandro (González Iñárritu), mis compadres; como Gael (García Bernal), como Salma (Hayek) y muchos de ustedes. En los últimos 25 años, hemos vivido en un país que hemos hecho nuestro”, fueron las primeras palabras del director oriundo de Guadalajara, con el teatro Dolby de pie escuchándolo atentamente.
“Lo más grandioso que hacen nuestro arte y nuestra industria es borrar las líneas en la arena. Deberíamos seguir haciendo eso en un momento en el que el mundo nos pide que las profundicemos”, comentó, en clara alusión a la polí- tica inmigratoria del gobierno de Donald Trump.
Cuando le comentaron que era el cuarto Oscar para un director mejicano en las últimas cinco ediciones, Alejandro González Iñárritu (ganador en 2015 y en 2016) definió con certeza: “¡Vamos a construir un muro de puros Oscar!”. El realizador se mostró orgulloso por el logro de su amigo y exhibió su emoción en declaraciones a El País (España): “La película de Guillermo toca el corazón, y cuando una película toca el corazón, no hay competencia”.
Fiesta animada
Otros de los premios festejados como propios en México fueron los otorgados a Coco. El filme de Disney Pixar logró condensar buena parte del espíritu del tradicional festejo del Día de los Muertos que se realiza en el país azteca. Por eso, la historia del pequeño Miguel fue abrazada como una extensión digital del sentir mejicano. Y el Oscar a mejor película animada, que estaba cantado, llegó como un reconocimiento a otra de esas cintas en las que contener las lágrimas se vuelve un reto.
Lo que no estuvo tan bien “cantado” fue, precisamente, la pieza musical de la película, que recibió el premio a mejor composición original. Además de una instrumentación y de un diseño escénico y coreográfico cargados de referencias chilangas, la actuación sumó a un dubitativo Gael García Bernal en la introducción.
Por suerte, Miguel (cantante estadounidense pero también con raíces latinas) y la mejicana Natalia Lafourcade salieron a escena para revertir el paso en falso del actor. Juntos interpretaron la versión anglosajona del tema (cantada en español por Carlos Rivera), que incluye varios fragmentos en castellano y sirvió como una nueva oda a la cultura hispanoamericana en sentido amplio.
Orgullo trasandino
El otro país que celebró especialmente en la 90ª edición de los Oscar fue Chile. Una mujer fantástica confirmó los favoritismos que la antecedían y se alzó con el premio a mejor película en lengua no inglesa. “Esta película fue hecha por muchos amigos y artistas. Comparto esto con todos ustedes esta noche”, dijo su director al recibir la estatuilla, segundo Oscar en la historia de su país.
Michelle Bachelet y Sebastián Piñera, presidenta actual y mandatario electo del país transandino, expresaron su alegría en las redes. “Mis mayores felicitaciones a Sebastián Lelio, a Daniela Vega, a Gonzalo Maza y a todo el equipo de Una mujer fantástica”, escribió Bachelet en su cuenta de Twitter.
“El premio, que nos llena de orgullo, no sólo reconoce a una película de gran calidad, sino a una historia de respeto por la diversidad que nos hace bien como país”, añadió la mandataria en la
red social. Piñera, en tanto, destacó que “el cine chileno tocó las estrellas” en la antesala a asumir el cargo de presidente el próximo domingo. “Grande, Chile, y un gran abrazo, con emoción, a todo el equipo de Una mujer fantástica”, agregó.
Presencia
México y Chile estuvieron representados también a la hora de los anuncios sobre el escenario. La joven actriz Eiza González presentó los trofeos a mejor edición de sonido y a mejor mezcla de sonido, mientras que su compatriota, el comediante Eugenio Derbez, fue el encargado de introducir la performance de la canción original de Coco.
Derbez también hizo referencia al muro que separa México de Estados Unidos con un intento de chiste. “En la película, un niño mejicano de 12 años cruza la frontera de la tierra de los vivos hacia la de los muertos. Porque ustedes saben que en el más allá no hay muros”, dijo, aunque no recibió demasiadas risas como respuesta.
Sin embargo, quien encandiló a gran parte de Hollywood fue Daniela Vega, la actriz chilena que se convirtió en la primera mujer trans en participar activamente de la ceremonia. Cuando introdujo la actuación de Sufjan Stevens para interpretar otra de las candidatas a mejor canción original, Vega acaparó todas las miradas.
Desde hace unas semanas, la protagonista de Una mujer fantástica es toda una celebridad en Los Ángeles, donde su performance y su historia encontraron gran eco. Cuando Sebastián Lelio le agradeció “por ser la inspiración de esta película”, los aplausos se hicieron escuchar y el círculo se cerró con una de las ovaciones más emocionantes de la noche.