El aeropuerto de los 3 millones de viajeros al año
En marzo, el Ambrosio Taravella superó una marca histórica. Habrá más inversiones por obras pendientes.
En marzo, el aeropuerto Ambrosio Taravella logró superar la marca histórica de tres millones de pasajeros transportados en un año.
La estación aérea muestra una intensa actividad que la llevó a duplicar la cantidad de viajeros en cuatro años, y las previsiones indican que ese aumento no se detendrá, al menos en los próximos dos años.
En paralelo, el aeropuerto cordobés manifiesta una serie de falencias de infraestructura para atender la demanda creciente. Algunas obras serán encaradas este año y finalizarán en 2019.
Cada 10 minutos, un avión aterriza o despega en el aeropuerto Ambrosio Taravella. A ese ritmo promedio trabaja la terminal aérea cordobesa durante sus cuatro horas de mayor actividad cotidiana: en la mañana y al atardecer. Durante el año pasado, sus pistas registraron unos 78 movimientos (arribos y despegues) por día, concentrados en mayor medida entre las 8 y las 12, y entre las 17 y las 19.
El momento más frenético monitoreado por las estadísticas de la Empresa Argentina de Navegación Aérea (Eana) –una sociedad del Estado bajo la órbita del Ministerio de Transporte de la Nación– fue el arranque de cada jornada, cuando el promedio de personas que volaba a través del Taravella se ubicó en 650. Un número que no incluye a sus 1.800 empleados ni la circulación extra de visitantes, y que supera por varios cuerpos, por ejemplo, los
600 espacios de estacionamiento que tiene el complejo.
Un miércoles de diciembre del año pasado se convirtió en un día histórico: redondeó un récord de
10 mil pasajeros transportados. Y todo eso pasó antes de las novedades de 2018: las más importantes, la aparición de los vuelos de Flybondi –hasta ahora, de cabotaje– y de Azul Líneas Aéreas, que viaja a Recife, Brasil.
Así de impactantes son todas las cifras que reflejan el crecimiento de la terminal cordobesa, que viene sumando rutas, vuelos y pasajeros sostenidamente en los últimos años, pero con un salto fuerte desde 2017. Desde entonces, recibió un jugoso envión al convertirse en sede del hub (centro de distribución de vuelos) regional de Aerolíneas Argentinas y comenzar a sumar nuevas operadoras en el marco de la llamada “revolución de los aviones”.
Esta política de fuerte impulso de la industria aerocomercial –la meta es duplicar los pasajeros que transporta hacia 2019– ejecutada por el Gobierno nacional depara un rol protagónico para el Taravella: lo consolida en el país como el principal punto de conexión de los vuelos domésticos que no pasan por Buenos Aires y como la terminal con más salidas internacionales directas del interior.
El costado complejo del crecimiento –que seguirá con fuerza este año y en 2019– es la urgente necesidad de mejoras para ganar lugar. La última ampliación importante de la estación se terminó en junio de 2016 e insumió 600 millones de pesos. Sin embargo, entre ese año y el siguiente, los aterrizajes y los despegues crecieron más del 40 por ciento, y el movimiento global de pasajeros, casi un 30 por ciento. Y entre otras novedades, llegaron el hub de Aerolíneas y las nuevas empresas.
Con ese escenario, desde el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna) y Aeropuertos Argentina 2000 adelantan que en junio arrancará la ejecución del ambicioso plan de trabajos del lado “aire” (donde operan los aviones) y “tierra” (la terminal) del Taravella. Implicará inversiones compartidas entre el Estado y la concesionaria por 1.500 millones de pesos (ver El plan...). “Ahora estamos mejorando el acceso al aeropuerto, y se está adjudicando la obra de ampliación del estacionamiento vehicular con más de 300 nuevas cocheras. Su inicio se prevé para junio”, aseguróa La Voz Patricio Di Stefano, presidente del Orsna.
24 vuelos nuevos
En marzo de este año, el Taravella se anotó otro récord: perforó el techo de los tres millones de pasajeros anuales (en los últimos 12 meses). El flujo de viajeros que pasaron por él en el primer trimestre de 2018 fue más del doble que hace cuatro años: de 292 mil contra
139 mil, según estadísticas del Ministerio de Transporte nacional.
En ese lapso, los dos primeros años creció a una tasa promedio del 15 por ciento, pero se aceleró al
25 por ciento en los dos siguientes. Este incremento proyectado al
2019 sugiere que la estación podrá recibir más de 365 mil viajeros, algo que suena hasta tibio si se mira el caudal de nuevos vuelos y las rutas autorizadas que deben comenzar a operar.
Entre los confirmados para este año y principio del próximo, y los anunciados que esperan fecha, suman 24 (sin considerar refuerzos estacionales), un número que se multiplica al hacer entrar las rutas habilitadas en audiencias a nuevas empresas por el Ministerio de Transporte.
La novedad que genera más expectativa a las autoridades cordobesas de Turismo es el arranque de la low cost Norwegian Air Argentina, la filial local de la aerolínea europea que debutó en febrero de 2018 uniendo Ezeiza con Londres.
La empresa tiene autorizadas desde Córdoba ocho rutas de cabotaje y siete internacionales. Según lo que anunció, comenzaría a operar las primeras desde junio, y el resto a fin de año (Barcelona, Cancún, Fort de France en Martinica, La Habana, Pointe a Pitre en Guadalupe, Punta Cana y Salvador de Bahía).
El vuelo que tiene fecha confirmada es el de American Airlines a Miami (Estados Unidos): arrancará el 2 de abril de 2019, con lo que regresa una conexión esperada.
22 destinos internacionales
Sólo en materia de conectividad internacional, y según información recopilada por la Agencia Córdoba Turismo local, el Gobierno nacional aprobó 101 rutas que unen Córdoba con destinos extranjeros a ocho aerolíneas desde el inicio de la citada “revolución” aérea.
Este proceso avanza sin pausa y se prevé que se acelere este año, ya que entre las últimas medidas dispuestas por la cartera de Transporte figura la de fijar un plazo de un año para comenzar a operar una ruta, contado desde la fecha en que fue autorizada a una aerolínea.
Con eso se busca impulsar la actividad –sobre todo de las nuevas compañías que deben constituir sede argentina– y evitar la especulación a la hora de ir por los permisos.
Aunque tanto pasajeros interna- cionales como de cabotaje se duplicaron desde 2014 a la fecha, los primeros crecieron más: 113 por ciento contra 109 por ciento. Vale aclarar que en términos absolutos, el tráfico doméstico continúa aportando mucho mayor volumen: de cada 10 viajeros, sólo poco más de tres son internacionales (ver Cabotaje...).
En 2015, y según datos de Eana, Córdoba tenía seis conexiones internacionales. Hoy ya está conectada con 16 ciudades en el exterior –incluyendo vuelos estacionales– y, si se suman las nuevas rutas de Norwegian, American, Aerolíneas y Flybondi, esa cantidad subirá a 22.
Además de ayudar al aumento de argentinos que salen al exterior, la mejora en la conectividad internacional permitió en que, en enero y febrero de este año, Córdoba recibiera un 27 por ciento más de turistas extranjeros por aire (13.665).