Liverpool no debió sufrir tanto al final
Parece una cosa de locos: ganar
5-2, pero terminar sufriendo. La dinámica de lo impensado, como lo bautizó Dante Panzeri, se volvió a ver ayer en Liverpool. Es que el equipo inglés estaba viviendo un momento pletórico con su faena en el cotejo de ida de unas de las semifinales de Champions League. Lo ganaba 5-0. Pero se quedó en el final y Roma le abrió la puerta a su esperanza, marcando dos goles.
Jürgen Klopp, DT de Liverpool, aseguró que estaría más contento si su equipo no hubiese recibido dos goles en el final del partido, pero igual valoró el triunfo por 5-2.
“Durante 80 minutos fue genial”, remarcó el entrenador tras el encuentro disputado en Anfield. “Estaría mucho más contento si hubiéramos ganado por 51 o 5-0. Pero los muchachos jugaron muy bien y no hubiera imaginado esto antes del partido”, destacó el alemán. Además, para Klopp, haber recibido dos tantos en el final del partido no es tan grave como la lesión en la rodilla que sufrió el mediocampista Alex Oxlade-Chamberlain.
Faraónico
El egipcio Mohamed Salah dio otra muestra de su notable presente. Ayer marcó dos golazos para el vencedor, con exquisitas definiciones. De todos modos, no los festejó, por su pasado en el equipo de la capital italiana.
Además, Salah dio dos asistencias. Mané y un doblete de Firmino completaron el quinteto de festejos rojos. Sin embargo, Roma le imprimió un poco de suspenso a una semifinal que ya parecía definida muy de antemano, a partir de los descuentos marcados por Dzeko y el argentino Diego Perotti, de penal.
“La guerra no está perdida”, dijo el defensor argentino Federico Fazzio, tras el partido. “Vamos a luchar hasta el final y ya demostramos que podemos hacerlo”, completó el zaguero del seleccionado albiceleste.