Revisan varias cámaras: la clave para el caso del crimen de la odontóloga
“Rogamos que alguien nos escuche y que haga algo antes de que la basura nos termite sepultando a todos”.
Así resume Alejandra Acosta la aflicción que domina el ánimo de los integrantes de la Comunidad Renó, ubicada en el sudoeste de la ciudad de Córdoba.
La mujer es referente de las 400 familias de ese asentamiento precario que se asoma al discurso urbano detrás de montañas de desperdicios, que se acumulan sin cesar entre avenida Circunvalación y la calle Colonia Impira, a un par de cuadras de la usina termoeléctrica “Ingeniero Francisco Bazán”, de Epec.
Las consecuencias de vivir en ese entorno insalubre se manifiestan en forma de llagas purulentas en el cuero cabelludo de los chicos, en la tos seca de los viejos y en la piel ulcerada de todos.
“A mi hija adolescente se le llenó la cara de ronchas y en el (hospital) Rawson le dijeron que se lavara con jabón blanco, le dieron antibiótico para que tomara y también una loción para que se pusiera sobre las lastimaduras; así y todo, le costó muchísimo sanar”, asegura Acosta.
Los vecinos de la barriada trabajan en su mayoría como jornaleros de la construcción, changarines y empleadas por hora en casas de familia.
Habitan en viviendas muy precarias repartidas en 11 manzanas.
“Como no tenemos la categoría de barrio, sino que para la Municipalidad somos una villa, ni Lusa ni Cotreco nos tienen en cuenta para la recolección”, explica la referente. “Entonces, muchos queman la basura, y respirar ese aire contaminado causa trastornos en las vías respiratorias”, advirtió Acosta.
Ecos del suplicio
El eco de las plegarias de los afectados por la situación sanitaria se escuchará hoy en el Concejo Deliberante.
Eso porque la edila Nadia Fernández (Unión por Córdoba) presentará un proyecto para que se declare la emergencia ambiental en el asentamiento.
“Los vecinos de la comunidad Renó están abandonados desde hace años y desde la Municipalidad se empeñan en frenar la regularización y el reconocimiento como barrio. Una excusa perfecta para que las empresas de recolección no vayan y el Gobierno de la ciudad mire para otro lado”, cuestionó la legisladora opositora.
“El barrio existe desde hace unos 30 años y en la actualidad las familias que lo conforman viven entre la basura. Además del olor y de todo lo que genera vivir al lado de un basural a cielo abierto, causa numerosas enfermedades”, concluyó la concejala promotora de la iniciativa. La concejala Victoria Flores (Pensando Córdoba) pidió declarar la emergencia sanitaria del hospital Infantil Municipal por el término de 180 días, “a los efectos de garantizar la correcta prestación del servicio de salud a la población, ante la falta de personal y de condiciones de infraestructura”. Flores hizo el pedido a través de un proyecto de ordenanza que puso a consideración del Concejo Deliberante. En el marco de un marcado hermetismo judicial, la investigación por el crimen de la odontóloga Silvia Maddalena (37) está a la espera del resultado de varios peritajes que acerquen mayores certezas sobre el caso.
El fiscal Alejandro Peralta Otonello, quien ya había adelantado que se trató de una “muerte violenta”, prefirió ayer no avanzar con ninguna declaración pública. “Estamos investigando con intensidad varias hipótesis abiertas, y no hablaremos hasta tener mayores certezas, con los resultados de los peritajes que estamos aguardando”, se limitó a señalar.
Una prueba clave se espera que sean los análisis en marcha de las filmaciones de diferentes cámaras: la del propio consultorio de la víctima, las de negocios vecinos, y la de un domo en la vía pública instalado sobre la misma Avenida del Libertador, donde ocurrió el homicidio.
Mientras, la Policía Judicial ya tomó muestras de huellas, entre otras medidas, y el fiscal espera tener hoy, además, todos los resultados de la autopsia.
Se conoció ayer que en la Justicia ya declararon varios testigos, entre ellos, vecinos del consultorio y los pacientes que fueron atendidos durante la tarde del viernes.
Maddalena fue hallada muerta el sábado pasado, luego de que su padre dio aviso a la Policía, tras no poder comunicarse con ella durante todo el día. Se presume que el homicidio ocurrió entre las 20 del viernes y las primeras horas del sábado. La puerta del consultorio no estaba forzada.
“Se mantienen varias líneas de investigación abiertas, algunas más avanzadas a partir de los datos que van llegando de las medidas que se han pedido, pero falta”, indicó ayer una fuente judicial a este diario.
Aunque no hay certezas todavía, no se descarta el femicidio entre las hipótesis.
En las próximas horas, podría al menos definirse una hipótesis central. Desde la Fiscalía, se apuntó que el caso –que ha conmovido a la ciudad de Alta Gracia– se investiga “en diálogo con la familia de la víctima” .