UNC: un paro con los estudiantes en el aula
Los dirigentes estudiantiles de la Casa de Trejo creen que es la mejor forma de visibilizar y de masificar el conf licto. El martes, comenzará la tercera semana de paro docente. El miércoles, habrá una marcha que ya recibió el aval de las autoridades univ
En la tercera semana de conflicto, los dirigentes estudiantiles de la UNC mantienen su postura de apoyo a los reclamos salariales que mantienen paralizada la universidad, aunque plantean que la mejor manera de confrontar es con los estudiantes en las aulas.
El conflicto universitario iniciará el próximo martes su tercera semana de paro docente. La falta de clases comienza a ser un problema para los estudiantes de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC); en especial, para aquellos que no viven en la Capital.
La dirigencia estudiantil ha tomado nota de este problema e impulsa una modalidad de paro activo; es decir, que los docentes concurran a las aulas.
“Nos preocupa que no se destrabe el conflicto, por eso acompañamos a los profesores, aunque entendemos la preocupación de los más 30 mil estudiantes del interior de la provincia y de los otros siete mil del interior del país, que se ven muy perjudicados por la interrupción de las actividades en la universidad”, comentó Samir Mohuana, presidente de la Federación Universitaria de Córdoba (FUC) por el frente Deodoro Roca.
Y agregó: “Estamos proponiendo la modalidad de paro activo para que los estudiantes puedan seguir con normalidad el desarrollo de sus clases, pero también que ese espacio sirva para exponer la problemática. De esta manera, los estudiantes no van a ver el conflicto como un perjuicio y conocerán la situación de fondo que hay detrás de los paros”.
En muchos casos, la modalidad de paro activo no implica que las clases se den normalmente, sino que se dictarán clases públicas u otras intervenciones de protesta.
“Algunos docentes van a dar clases y reservan un tiempo para hablar del conflicto. Dejar sin clases a los chicos es doloroso para nosotros, pero a los colegas les pedimos que si dan clases generen un espacio para dar a conocer el conflicto”, indicó Javier Blanco, secretario general de la Asociación de Docentes e Investigadores Universitarios de Córdoba (Adiuc).
De todas formas, Blanco indicó que la adhesión que hay al paro es mucho más alta que en años anteriores y comparable a momentos bisagra para la universidad, como en 2001 y en 2005.
Blanco destacó que se están realizando muchas medidas de protesta en todas la instituciones de la UNC. Por ejemplo, ayer se realizó un abrazo al Monserrat y se dictó una clase pública en las escaleras de la Facultad de Derecho.
El reclamo
En lo que va del año, los docentes universitarios sólo recibieron un cinco por ciento de incremento en abril. En ese momento, el Gobierno nacional decidió suspender la mesa paritaria.
Los gremios y la Nación recién volvieron a reunirse esta semana. Pero el Gobierno ofreció un incremento del 10,8 por ciento más y en dos tramos, para mayo y agosto. Los dirigentes docentes rechazaron la propuesta.
Pero, además, las universidades también están sufriendo recortes en los fondos destinados a infraestructura y retrasos en el giro de dinero para los gastos corrientes. Estos problemas se suman a los ajustes que está sufriendo el sistema científico, muy vinculado a las universidades.
Para Luca Miani, secretario general de la FUC por el frente Agustín Tosco, lo importante no es tener o no tener clases.
“Lo importante es que las aulas no se vacíen para poder discutir los problemas que están afectando a las universidades”, indicó.
Miani explicó que el paro activo debe servir para concientizar y masificar el conflicto. “En las facultades masivas hay sectores que todavía no están comprometido con el problema”, comentó.
Y advirtió que la educación pública no puede ser un factor de ajuste. “En universidades más chicas, la crisis se siente más y algunas corren el riesgo de cerrar”, dijo. En tanto, Mohuana, de la agrupación radical Franja Morada, indicó que están pensando en generar instancias de diálogo con los legisladores para poder destrabar el conflicto.
En el Belgrano
La postura de la dirigencia estudiantil de la Escuela Superior de Comercio Manuel Belgrano, dependiente de la UNC, es aún más tajante.
“Apoyamos ciento por ciento la lucha docente. No queremos tener clases cuando los docentes no están teniendo un salario digno”, indicó Ana García, consejera estudiantil de esta institución.
Y agregó: “El Gobierno es el culpable de la situación porque no está interesado en mejorar los salarios y está implementando políticas neoliberales que están dañando a las universidades”.
En la asamblea interclaustro realizada el jueves en esta escuela, un sector de los padres reclamó a los docentes que adopten una modalidad de reclamo con clases parciales, pero no prosperó.