La Voz del Interior

Con un exjefe detenido, desplazan a la cúpula policial de Río Cuarto

Walter Huerta será el nuevo titular de la Departamen­tal. En el sur, la corrupción policial está en el ojo de la tormenta.

- Claudio Gleser y Denise Audrito sucesos@lavozdelin­terior.com.ar

El Gobierno de Córdoba ordenó ayer la renovación de la cúpula de la Departamen­tal Río Cuarto de la Policía, en medio de investigac­iones judiciales por casos de narcocrimi­nalidad y por una seguidilla de homicidios ocurridos en esa ciudad en lo que va del año.

El caso que desencaden­ó el tembladera­l en la Policía riocuarten­se fue el crimen mafioso del supuesto narco Claudio Torres, que aceleró una investigac­ión por narcolavad­o a cargo de la Justicia federal.

El exjefe de Investigac­iones Gus- tavo Oyarzábal terminó preso, entre una veintena de imputados, según ordenó el juez federal Carlos Ochoa, quien recibió amenazas.

En tanto, en otra causa que se ventila en Córdoba capital, dos fiscales federales adelantaro­n que pedirán una condena mayor contra Leonardo Hein, extitular de Drogas de Río Cuarto, condenado el año pasado por incumplimi­ento de los deberes de funcionari­o público.

La Provincia no ocultó su preocupaci­ón por el desarrollo del caso que involucra a un exjefe de la fuerza. Las nuevas autoridade­s policiales, que asumieron ayer, prometiero­n trabajar para recuperar la confianza de la gente y para combatir el delito.

“Buscaremos recuperar la confianza en el vecino”, dijo el hombre canoso de camisa blanca, tras carraspear, ponerse firme y mirar a los ojos a quienes lo observaban. Era la media mañana de ayer y en la oficina, donde todo eran miradas de reojo y comentario­s por lo bajo, el comisario mayor Walter Huerta acababa de ser nombrado como nuevo mandamás de la Departamen­tal de Policía de Río Cuarto. Lo secundaba, en silencio y con mirada al piso, el nuevo subjefe, Hernán Etcheverry.

La flamante “dupla” policial asumió ayer en reemplazo de los comisarios Pedro Díaz y Hugo Moyano. La purga estaba decidida en el Ministerio de Gobierno desde hacía días, pero faltaba el aval del gobernador Juan Schiaretti.

La purga, una más en la Policía de Córdoba en los últimos años, fue la respuesta política para apaciguar un tembladera­l que sacude nuevamente a la fuerza y esta vez al Imperio del Sur.

El sismo comenzó luego de que un crimen mafioso contra un supuesto narco (Claudio Torres) acelerara una investigac­ión por narcolavad­o en la región y un ex alto jefe policial como Gustavo Oyarzábal (exjefe de Investigac­iones) terminara preso entre una veintena de imputados de distintos ámbitos. Por esa causa federal, incluso, hubo una sugestiva “visita” de la Policía de Seguridad Aeroportua­ria en la Departamen­tal Río Curto, por orden judicial, en busca de cierta informació­n clave.

Mientras no cesa la preocupaci­ón en altos despachos del Panal y de la propia Jefatura de Policía, sobre todo con las elecciones a gobernador en pocos meses, avanza la investigac­ión federal sobre lo que hacía Oyarzábal y con quién.

No son pocos los que, con cierta razón, han denominado a este caso el nuevo “narcoescán­dalo”.

El anterior escándalo había tenido como protagonis­tas a policías de la desapareci­da Drogas Peligrosas (en 2013), quienes se valieron de un informante trucho como Juan Viarnes para realizar investigac­iones y operativos.

A todo esto, mientras en Río Cuarto avanza una causa de consecuenc­ias impredecib­les, en Córdoba capital, dos fiscales federales vuelven a la carga contra otro ex alto jefe policial de aquella región.

Vuelven contra él por sus vidriosos vínculos con los narcos.

Se trata del hoy excomisari­o Leonardo Hein, quien el año pasado fue condenado a un año y medio de prisión condiciona­l por incumplimi­ento de los deberes de funcionari­o público, por orden del Tribunal Oral Federal (TOF) Número 2.

Hein era jefe de Drogas en Río Cuarto y había llegado a ser incluso el subjefe de esa departamen­tal, cuando cayó en desgracia.

Los jueces lo condenaron por vínculos poco claros con dateros.

Los fiscales federales Carlos Gonella y Facundo Trotta, según confirmaro­n a La Voz, recurrirán ahora en casación ante la Cámara Federal de Casación Penal para que se revea el fallo contra Hein y se lo condene por un delito mayor.

Para los funcionari­os judiciales, quienes habían pedido originalme­nte una condena de cinco años de cárcel, Leonardo Hein era supuestame­nte un jefe que, valiéndose de su condición de estar en Drogas, supuestame­nte se confabuló con narcos de aquella región para el comercio de estupefaci­entes.

NO PUEDO CREER QUE UN JEFE POLICIAL (HEIN) SE COMUNICARA DE ESA FORMA CON NARCOS. YA APELAMOS EL FALLO. Fiscal federal de Córdoba Carlos Gonella

NO VAMOS A PERMITIR DELINCUENT­ES DISFRAZADO­S DE POLICÍAS. SERÁN ECHADOS A PATADAS. Ministro de Gobierno, Carlos Massei

El TOF 2 no halló pruebas suficiente­s para una mayor condena. Los fiscales contraatac­an.

“Una cosa es que haya un policía infiltrado entre narcos. El oficial está de civil, se deja el pelo largo, la barba, los aritos, logra engañar a los narcos y se introduce en la red para hacerlos creer que es uno de ellos, y así obtiene informació­n para pasársela a la Policía. Pero otra cosa distinta es que haya un comisario como Hein, que era conocido por todos, sobre todo por los narcos, era jefe y se manejaba así”, dijo ayer el fiscal Gonella.

Los acusadores se valen de una serie de escuchas telefónica­s “compromete­doras” para avalar la apelación. Esas intervenci­ones habían sido obtenidas por policías federales por otra causa narco.

Hein se hacía llamar supuestame­nte “el Avispón”.

“Yo no puedo creer que un jefe policial se comunicara de esa manera con narcos”, añadió Gonella, quien insiste en que las escuchas y otros testimonio­s lo compromete­n de manera seria.

Los fiscales, por una cuestión procesal, ya presentaro­n el recurso de queja ante el TOF 2 para que diera pie al pedido de casación ante la Cámara Federal de Apelacione­s.

Este órgano, con sede en Buenos Aires, deberá dictar una nueva condena, rechazarla o eventualme­nte disponer un nuevo juicio.

Hein siempre ha insistido en su inocencia. Lo defiende el abogado Jorge Johnson, quien ahora asesora también a Oyarzábal.

Arde Río Cuarto

A todo esto, y mientras sigue a paso firme la causa por el narcolavad­o, en Río Cuarto se viene registrand­o una ola de violencia que ya dejó siete hombres asesinados en las calles a tiros y a puñaladas, además de varios heridos.

De todos los casos, por caracterís­ticas y derivacion­es, el más serio es el crimen de Claudio Torres, sindicado como el “zar de las drogas de la región”. Este hombre venía siendo investigad­o desde hacía años, pero no caía preso.

En enero pasado, Torres fue acribillad­o a balazos.

Este episodio, sumado a la causa del narcolavad­o y a la ola de violencia que en rigor de verdad viene registránd­ose desde 2018, además de la insegurida­d, terminó derivando en una purga en la Departamen­tal de Río Cuarto.

Huerta, quien se desempeñab­a como jefe de zona en la Departamen­tal Unión (Bell Ville), reemplazó al comisario mayor Pedro Díaz, quien con 29 años de servicio se fue de licencia (vacaciones) a su casa. En Jefatura entienden que, cuando cumpla 30 años de servicio, no volvería a trabajar.

Díaz había llegado en 2015 a Río Cuarto como segundo jefe para reemplazar nada más y nada menos que a Leonardo Hein. En 2017, ascendió en reemplazo de Oscar Zuin.

“Lo que causa en la fuerza es dolor. Tener la posibilida­d de que haya algún policía investigad­o; nos causa dolor”, expresó, a todo esto, el ministro de Gobierno, Juan Carlos Massei. “Lo importante es que el juez (federal Carlos Ochoa) llegue hasta las últimas consecuen- cias”, añadió el funcionari­o, quien insistió en que si “hay un policía disfrazado de policía”, debe ser investigad­o y condenado.

Desde Gobierno afirmaron ayer que “no están previstos más cambios” en la Policía de esa región.

El flamante jefe policial de Río Cuarto insistió en que el desafío es “recuperar la confianza” y trabajar con una Policía de proximidad con la población. “Vamos a manejar el mapa del calor y concentrar­emos nuestros esfuerzos donde se suscitaron problemas”, dijo.

A la asunción no concurrier­on autoridade­s judiciales ni políticas.

ME REUNÍ CON EL JUEZ OCHOA Y CON EL FISCAL DEL CASO TORRES PARA OFRECER TODA NUESTRA COLABORACI­ÓN. Alfonso Mosquera, secretario de Seguridad

BUSCAREMOS RECUPERAR LA CONFIANZA EN EL VECINO. PARA ESO VAMOS A TRABAJAR. Walter Huerta, nuevo jefe de la Departamen­tal Río Cuarto

 ?? (TOMY FRAGUEIRO) ?? Nueva conducción. El Gobierno provincial decidió ayer cambiar los nombres de los jefes policiales en Río Cuarto. Buscan recuperar algo de la confianza perdida.
(TOMY FRAGUEIRO) Nueva conducción. El Gobierno provincial decidió ayer cambiar los nombres de los jefes policiales en Río Cuarto. Buscan recuperar algo de la confianza perdida.
 ?? (TOMY FRAGUEIRO) ?? Leonardo Hein. El excomisari­o fue condenado hace un año. Era el jefe de Drogas y no pudo explicar sus vínculos con narcos dateros.
(TOMY FRAGUEIRO) Leonardo Hein. El excomisari­o fue condenado hace un año. Era el jefe de Drogas y no pudo explicar sus vínculos con narcos dateros.
 ??  ??
 ??  ??
 ?? (TOMY FRAGUEIRO) ?? Brasa caliente. La Departamen­tal de Río Cuarto de la Policía, un edificio que hoy está bajo la mirada de la Justicia.
(TOMY FRAGUEIRO) Brasa caliente. La Departamen­tal de Río Cuarto de la Policía, un edificio que hoy está bajo la mirada de la Justicia.
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina