Donald Trump dijo que Maduro es un títere de Cuba
En Miami, dijo que el actual presidente es un “títere de Cuba”. Por ahora, las Fuerzas Armadas son el principal sostén del chavismo.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó ayer una amenaza directa a las Fuerzas Armadas de Venezuela y les advirtió que si continúan apoyando al gobierno de Nicolás Maduro, “van a perder todo”, durante un discurso desde Miami y rodeado de exiliados e inmigrantes latinos.
“Sabemos quiénes son y sabemos dónde guardan los miles de millones de dólares que se robaron. Si eligen, no van a encontrar refugio, van a perder todo”, aseguró el mandatario, quien ya aprobó en el pasado sanciones para conge- lar e incautar cuentas bancarias de empresas venezolanas, funcionarios y personas vinculados al Gobierno chavista.
“Están arriesgando su futuro y el futuro de Venezuela por un hombre que es controlado por los militares cubanos y protegido por un ejército privado de soldados cubanos. Maduro no es un patriota venezolano, es un títere cubano”.
Trump lanzó estas advertencias luego de denunciar que “el dictador Maduro bloqueó el ingreso de ayuda vital” a Venezuela y antes de pedirles a los militares que permitan el paso de la ayuda humanitaria el próximo sábado.
Analistas venezolanos y extranjeros coinciden en que las Fuerzas Armadas son el único actor institucional con capacidad de cambiar la relación de fuerza en Venezuela. Por eso, Maduro destacó una y otra vez el apoyo de la cúpula castrense y la disciplina que –salvo algunas excepciones– primó entre los oficiales y la tropa.
Sin definiciones
Pese a que el protagonismo de los militares en Venezuela quedó bien claro en el discurso, Trump no hizo ningún anuncio concreto, como algunos esperaban.
En cambio, se concentró en dar un mensaje lleno de simbolismo, por momentos más dirigido al electorado latino conservador en Estados Unidos –mayoritario en estados clave como Florida–, que a sus aliados latinoamericanos.
“Los días del socialismo están contados, no sólo en Venezuela, sino también en Nicaragua y en Cuba”, sostuvo, y el auditorio estalló en aplausos.
Trump habló en la Universidad Internacional de Florida, ubicada en el distrito de Sweetwater, una de las zonas de Miami donde se concentra la mayor parte de inmigrantes venezolanos.
En un gesto inusual, Trump fue presentado por su esposa, Melania Trump, una inmigrante de 48 años que nació en la ex-Yugoslavia socialista. “Muchos de los que están acá saben lo que es vivir bajo la opresión del socialismo y el comunismo”, sentenció la primera dama antes de pasarle el micrófono a su esposo.
En medio de una creciente escalada de tensión por la crisis en Venezuela, Trump no se enfocó sólo en ese país, sino que dio un mensaje contra el socialismo como sistema político.