Dos billones de dólares, el mayor rescate de la historia de EE.UU.
WASHINGTON. El Gobierno y el Congreso de Estados Unidos alcanzaron un acuerdo en las primeras horas de ayer sobre un enorme plan de rescate sin precedente, de dos billones de dólares, que asista a trabajadores, a empresas y a un sistema de salud rebasado por la creciente pandemia de Covid-19.
El paquete de rescate sin precedentes daría pagos directos a la mayoría de los estadounidenses, ampliaría las prestaciones por desempleo y habilitaría un programa de 367 mil millones de dólares para que los pequeños negocios sigan pagando los salarios mientras los trabajadores se ven obligados a quedarse en casa.
El paquete, que se necesitaba con urgencia, es el mayor rescate económico de la historia de Estados Unidos y pretende servir de paracaídas durante semanas o meses ante una pandemia que empuja la economía hacia una recesión y podría cobrar un alto precio entre la población.
“Al pueblo estadounidense le decimos: está en camino una ayuda rápida y de gran magnitud”, declaró el líder de los demócratas en el Senado, Chuck Schumer.
La presidenta de la Cámara Baja, Nancy Pelosi, afirmó en un comunicado que el acuerdo “hace mucho por satisfacer las necesidades del pueblo estadounidense”.
Los miembros de la Cámara Baja están dispersos en todo el país y no queda claro si podrán acudir allí para votar.
Los legisladores aspiraban a poder aprobar la medida en una votación a voz, sin tener que obligar a los legisladores a regresar a Washington. Como sea, los legisladores más conservadores se oponen al acuerdo debido al gasto público que implica y hay algunos liberales que también se han expresado escépticos.
El asesor de la Casa Blanca Eric Ueland anunció el acuerdo en un pasillo del Capitolio poco después de la medianoche del martes, tras días de regateos intensos y una presión enorme. El texto aún tenía que redactarse en un lenguaje legislativo detallado.
Una de las últimas diferencias en resolverse afectaba a los 500 mil millones de dólares en préstamos garantizados y subvencionados a las empresas más grandes, lo que incluía una disputa sobre cuán generoso ser con las aerolíneas. También los hospitales recibirían ayudas significativas.
Controversias
Pese al acuerdo, no menguaron las críticas a la forma en que la administración central del país está encarando la lucha contra la pandemia. Uno de los principales críticos es el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, quien consideró insuficiente el paquete de estímulo fiscal.
En defensa de su gestión, el presidente Donald Trump dijo que trabaja “muy duro” para dar ayuda al estado de Nueva York, que con más de 30 mil contagios y 285 muertos se transformó en una virtual zona cero del brote de coronavirus en el país.
En su cuenta de Twitter, el mandatario aseguró que trabaja junto al gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, y que parte de la ayuda será para la construcción de “cuatro nuevos centros médicos y cuatro nuevos hospitales”.
Trump criticó las “noticias falsas” según las cuales no ayudará a Nueva York porque no le gusta Cuomo, que es del opositor Partido Demócrata, y agregó: “¡Acabo de enviar cuatro mil respiradores artificiales!”.
En este contexto, Cuomo afirmó que los dos billones de dólares no bastan, porque la asignación que le correspondería al estado que él
Muertos, contagiados y recuperados en el mundo.