Cuestión de orgullo
Hubo tensiones entre la Municipalidad y los veteranos de Malvinas por la bandera LGTBIQ+. Al final se llegó a un acuerdo.
La rotonda de la calle Deodoro Roca del parque Sarmiento ayer volvió a ser el lugar de conflicto por la bandera del orgullo gay que flameaba en el mástil desde el viernes por una disposición municipal del intendente con motivo de la conmemoración del Día Internacional del Orgullo LGTBIQ+ que cada 28 de junio recuerda los disturbios ocurrido en Stonewall (Nueva York, Estados Unidos), en 1969, y que dieron inicio al movimiento de liberación homosexual.
El sábado tres personas intentaron bajarla y desataron el enojo de la comunidad LGTBIQ+. Ayer ocurrió lo mismo, incluso con disturbios, hasta que llegaron al acuerdo de bajar la bandera arco iris a la cero hora, cuando terminó el Día del Orgullo, y hoy izar la bandera argentina a las 8.30 de la mañana.
En medio, organizaciones del sector recordaron la violencia que viven en la sociedad desde hace años. El Observatorio Nacional Mumalá detectó que en lo que va del año hubo 100 hechos de violencia de odio en Argentina: 56 ataques, cuatro crímenes y 40 transfemicidios.
Discusión
“Creo que se dio una falsa discusión. Acá no es una bandera u otra. Por supuesto que todos somos argentinos y es la bandera que nos incluye a todos. Lo que se intentó es demostrar, a raíz de la semana del orgullo, el compromiso de la Municipalidad para trabajar por la inclusión real de las minorías sexuales”, señaló Miguel Siciliano, secretario de Gobierno de la Municipalidad de Córdoba.
También recordó que en el programa Servidores Urbanos se incluyó a 10 personas trans y que el objetivo es generar políticas reales de inclusión al igual que un Foro Permanente de Diversidad.
Una nota firmada por más de 200 organizaciones de distintos sectores a nivel nacional apoyó la decisión del municipio cordobés y repudió lo que calificaron como un “hecho vandálico” la bajada de la bandera por el grupo que también destruyó la placa donde se explicaba la decisión de izar la insignia multicolor.
Pero también hubo otras lecturas. Desde el Frente de Izquierda repudiaron el accionar de los excombatientes, y fueron críticos con el oficialismo municipal, que el año pasado votó en contra del proyecto de ley de cupo laboral trans en el Concejo Deliberante.
Por su parte, el legislador radical Miguel Nicolás, emitió un comunicado proponiendo al jefe comunal Martín Llaryora la creación de otro mástil y allí incluir la bandera de la diversidad, “si es que el intendente quiere incluir y
no hacer demagogia política”.
Los hechos
El sábado tres personas, dos de ellos excombatientes de la Guerra de Malvinas, bajaron la bandera ya que lo consideraban una falta a la insignia patria. Un grupo de transeúntes registró lo ocurrido y hubo rechazos y el repudio generalizado del sector LGTBIQ+.
La Policía tuvo que intervenir y se volvió a izar la bandera multicolor y (papelón aparte) reemplazarla, porque la que habían subido era una perteneciente a Cuzco (Perú) muy similar a la del orgullo.
Pero ayer, veteranos de Malvinas se concentraron en la plaza San Martín para manifestar su descontento con la decisión municipal y luego se dirigieron al parque Sarmiento donde intentaron bajar la bandera nuevamente. “Nos oponemos porque no es la bandera que representa a todos los argentinos. La bandera de nuestros próceres es la que defendimos en Malvinas”, opinó César Claudio García, veterano de guerra.
Las agrupaciones que defienden los derechos de lesbianas, gays, bisexuales, transexuales, intersexuales, queers (LGBTIQ+) se convocaron para evitarlo. “Vinimos porque esta bandera representa que el amor puede ser vivido en todas sus expresiones”, dijo Romina, una joven autoconvocada.
AYER HUBO ALGUNOS ESCARCEOS EN EL PARQUE SARMIENTO ENTRE EXCOMBATIENTES Y MILITANTES POR LA DIVERSIDAD SEXUAL.