El lento retorno a la vida previa al Covid-19
Ayer reabrieron las ferias francas, y el COE se apresta a autorizar el servicio doméstico en la Capital.
Después de más de 100 días sin poder abrir sus puestos, ayer se autorizó la reapertura de las ferias francas en Córdoba capital. Los feriantes habían trasladado su inquietud para volver a trabajar a la Municipalidad de Córdoba, desde donde se elaboró el protocolo y se obtuvo un permiso para su funcionamiento gestionado ante el Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
Córdoba tiene siete ferias francas habilitadas por el municipio, las cuales trabajaban de forma itinerante en 42 puntos de la ciudad hasta antes del aislamiento social, preventivo y obligatorio. El protocolo del COE autorizó exclusivamente la reapertura de las siete ferias de venta de frutas, verduras, comidas y plantas, no así las de reventa de productos usados o los puestos de artesanos.
Con el nuevo permiso, retomaron ayer sus actividades los puesteros de las ferias francas de tres puntos de la ciudad: Nueva Córdoba, Cerro de las Rosas y Altos de Vélez Sársfield. Y en el transcurso de esta semana se definirá un cronograma para que los feriantes y los vecinos conozcan los sitios en los que seguirán trabajando. Hoy será el turno de San Vicente y de Parque Vélez Sársfield.
El director municipal de Ferias y Mercado, Julio Tejeda, explicó a La Voz que la ciudad tiene siete ferias francas que funcionarán en poco más de 20 puntos en esta primera etapa, ya que, para garantizar el distanciamiento social, se decidió que en algunos barrios aún no abrirán las 42 que funcionaban antes del aislamiento obligatorio.
“Las primeras ferias francas autorizadas son las de alimentos frescos, las que deberán tomar todas las medidas de bioseguridad para que un día a la semana puedan estar en un barrio y después en otro”, explicó Tejeda.
El protocolo les exige a los puesteros mantener distancia con sus clientes y entre las carpas de venta. Además, usar barbijo, disponer de alcohol en gel para el personal y los compradores, y no armar los puestos de manera enfrentada.