Ambientalistas reclaman por desmonte “hormiga” para loteos
El escenario del desmonte en Córdoba parece haber cambiado en los últimos años. Yo no se detectan tanto desmontes ilegales de decenas de hectáreas con fines ganaderos. Los ambientalistas denuncian que ahora avanza otro modo: una deforestación “hormiga” y silenciosa más ligada a loteos de viviendas.
El motor de esto es la tendencia de mucha gente que busca escaparse de las grandes ciudades para “vivir en el campo”. Frente a ello, los municipios autorizan loteos en la zona de las sierras, a veces con desconocimiento de que están en categoría roja, donde están prohibidas por la ley de bosques.
“Cada vez hay más gente que va a vivir a las sierras y estamos viendo muchos loteos y apertura de calles. Realizamos las denuncias, pero no hay respuesta. La sensación es que las autoridades no tienen recursos y que no es prioridad detener este tipo de desmonte”, dice Sara Mas, integrante de la Coordinadora en Defensa del Bosque Nativo (Codebona).
Y agrega: “Hay un desmonte silencioso. Van quitando de a poco algunos árboles, pero a lo largo de un año desmontan varias hectáreas. Es un práctica que vemos en toda la zona de las sierras”.
La ambientalista entiende que la Policía Ambiental tiene falencias en la forma de aplicar y de llegar al lugar donde se producen estos desmontes, porque le faltan recursos. Y sospecha que algunos de los incendios ocurridos el año pasado se asocian a loteos. “El objetivo es lograr un cambio en el uso del suelo con el fuego, para luego poder lotear”, advierte.
“La Provincia no tiene como prioridad el problema ambiental. Faltan leyes y un mejor control de las que ya hay. Por ejemplo, hace años que debe mejorarse y actualizarse el mapa de la ley de bosque nativo”, dice Mas.
En tanto, Fernando Barri, biólogo y docente de la cátedra Problemática Ambiental en la Universidad Nacional de Córdoba, coincide: “Ya no se dan tantos desmontes grandes, porque son más fáciles de detectar a través de imágenes satelitales. Pero hay una pequeña sangría de bosque nativo en las zonas serranas que no se está frenando”.
Barri acota que nadie se hace responsable de ese problema. “Hay una indefinición, entonces los privados avanzan con autorización o sin ella”, señala. Y explica que Ambiente de la
Provincia dice que es responsabilidad de los municipios. “Es muy difícil que la Policía Ambiental pueda controlar dentro y fuera de los ejidos municipales”, asegura Barri.
“Hay una desvinculación entre lo que hacen los municipios y la Provincia”, asegura a su vez Mas.
Barri reconoce que para muchos municipios pequeños es un tema nuevo y a veces no saben cómo actuar porque desconocen qué parte de su ejido está en zona roja, y piensan que debe intervenir Policía Ambiental de la Provincia.
“Hay que pensar que ese pequeño
Fenómeno. El deseo de cada vez más gente de mudarse a vivir a las zonas serranas, va generando la demanda por terrenos. Y aparece, cada vez más, loteos sobre zonas con bosque nativo, incluso las declaradas como de categoría roja de conservación.
desmonte sumado en el tiempo te hace perder cientos de hectáreas en zona roja. Son sectores que ya no se pueden recuperar porque han sido urbanizados, a diferencia del desmonte para cultivo que eventualmente puede restaurarse”, explica.
Adrián Rinaudo, director de Policía Ambiental, detalla que el sistema de imágenes satelitales que utilizan para monitorear el desmonte no permite detectar intervenciones menores a una hectárea. “Pero sabemos que el desmonte para loteos ocurre cerca de las localidades, entonces miramos atentamente allí. También se reciben denuncias porque ocurren en sectores poblados y la gente está atenta. Lo que hacemos es chequearlo con imágenes satelitales lo más rápido posible”, dijo.