Estudiarán la combinación de todas las vacunas que llegaron al país
COVID-19. Córdoba participará del ensayo nacional. La investigación espera aprobación del Comité de Bioética de la Provincia.
Córdoba participará de un estudio nacional que busca medir eficacia y seguridad en la combinación de diferentes vacunas contra el Sars-Cov-2. La investigación –que se encuentra en análisis del Comité de Bioética del Ministerio de Salud provincial– intentará determinar si quienes recibieron una dosis (por ejemplo, Sinopharm) pueden completar su esquema con una fórmula diferente.
El estudio es comandado por el Ministerio de Salud de la Nación en conjunto con el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet). Participan varias provincias, incluida Córdoba.
“Estamos esperando la aprobación del Comité de Bioética para avanzar en los detalles. Una vez que el protocolo sea avalado, vamos a convocar a voluntarios que participarán, mediante la firma de un consentimiento informado, como en cualquier otro protocolo de investigación”, informó Gabriela Barbás, secretaria de Prevención y Promoción de la Salud de Córdoba.
En el mundo hay en marcha diversos estudios que intentan analizar el efecto de distintas combinaciones de vacunas contra el Sars-Cov-2. Las investigaciones de “esquemas heterólogos” intentan determinar si el uso de diferentes plataformas resulta beneficioso o no, en especial para enfrentar a las nuevas variantes.
Por caso, en España, cinco centros llevan adelante un estudio de fase dos para evaluar seguridad y eficacia en un esquema que combina la fórmula del laboratorio Pfizer en conjunto con la AstraZeneca.
“Por el momento, ninguna combinación está aprobada, aunque, en un futuro próximo, seguramente se podrán intercambiar diferentes plataformas, como vectores virales con ARN mensajero”, explicaron a La Voz fuentes de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (Conain).
Para el caso del ensayo argentino, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ya comenzó a reclutar voluntarios. En Córdoba, se comenzará una vez que el protocolo de investigación consiga el aval del Comité de Bioética. Se estudiarán combinaciones (o intercambiabilidad) de todas las vacunas disponibles en el país, incluso si no comparten la misma plataforma.
“Esperamos tener buenos resultados que orienten decisiones en una estrategia de salud pública. Pero primero debemos contar con la aprobación del protocolo, porque las experiencias internacionales se realizaron con otras vacunas”, agregó Barbás.
El análisis de esquemas combinados cobra relevancia hoy, en un contexto de escasez mundial de algunas fórmulas, como el segundo componente de la Sputnik V, que es más difícil de producir. “Al margen de la disponibilidad del recurso, todavía no se sabe si el uso de diferentes plataformas será beneficioso o no, sobre todo para enfrentar nuevas variantes más efectivamente”, aclararon desde la Conain.
Sin fecha de vencimiento
En Córdoba, ya se aplicaron 2.298.379 dosis contra el Sars-Cov-2, un 50 por ciento más que hace un mes, cuando se llevaban inyectadas 1.541.047. El porcentaje de personas que recibieron las dos dosis se sigue ubicando en el 19 por ciento. Ya se ha regularizado la provisión de AstraZeneca y de Sinopharm.
En el caso de la fórmula de la Universidad de Oxford, la respuesta se potencia cuando más tiempo pasa entra una dosis y otra. Este mecanismo es habitual en todas las vacunas que utilizan adenovirus inactivado, como hepatitis B o HPV.
“En general, las defensas se activan con la segunda dosis de refuerzo. Pero la memoria no se pierde, sólo con los años. Es decir, por la edad o cuando pasa un tiempo prolongado sin que el sistema inmunológico sea estimulado”, reforzaron desde la Conain.
Autoridades sanitarias refuerzan un mensaje: “Las vacunas se vencen fuera de la heladera, pero no dentro del cuerpo”.
“Con la experiencia de plataformas conocidas de otras vacunas con vectores virales, la memoria no se pierde. Puede ser que después de un año desciendan. Pero, al ser desafiado, el cuerpo reacciona fuertemente con altos niveles de protección”, explicaron.
Plazo entre dosis
Según las últimas recomendaciones del Ministerio de Salud de la Nación, el plazo de espera entre una dosis y otra debe ser de ocho semanas para AstraZeneca y para Sputnik V. Y de cuatro semanas para Sinopharm. Autoridades sanitarias evalúan priorizar las segundas dosis elaboradas por el Instituto Gamaleya de Rusia en aquellos que no tuvieron la infección.