Covid-19. En busca de mayor seguridad, varios países aplican terceras dosis
MÁS COBERTURA. Ayer lo dispuso Francia. Alemania e Israel tomaron la delantera. Chile arrancó con la inoculación de refuerzos. Sigue la desigualdad en el acceso a las vacunas.
Mientras la Organización Mundial de la Salud (OMS) insta a los países más poderosos a modificar antes de octubre la “vergonzosa” postura con el propósito de revertir la desigualdad en el acceso a las vacunas contra el Covid-19, que está ocasionando estragos graves en las regiones más afectadas por la pobreza, algunas gobiernos nacionales hacen oídos sordos al pedido y avanzan en campañas para la colocación de dosis de refuerzo a su población.
Por caso, el Gobierno de Francia acordó ayer el inicio de la tercera ronda de vacunas contra el coronavirus a partir de mediados de septiembre, en un intento por reforzar la inmunización de “poblaciones de riesgo” frente a la posible expansión de nuevas variantes del coronavirus.
El presidente galo, Emmanuel Macron, alertó del riesgo que aún persiste por la pandemia. “La crisis sanitaria no ha pasado. Vamos a vivir todavía varios meses más con este virus”, declaró Macron quien se manifestó preocupado por la situación en los territorios de ultramar.
Macron apuntó que, a la vuelta de las vacaciones estivales, la vacunación volverá a centrarse en “personas de más de 80 años y particularmente vulnerables”, algo que apuntó también el vocero del Gobierno, Gabriel Attal, quien confirmó que a finales de agosto se abrirá de nuevo la convocatoria para este colectivo, cuyo alcance aún está por precisar.
Las autoridades quieren también reducir la expansión del virus en las zonas donde esté más extendido, lo que pasa porque en los departamentos con una tasa de incidencia de más de 200 casos por 100 mil habitantes se requiere de un pasaporte sanitario para entrar en grandes centros comerciales. También se retornará al uso de barbijos en interiores abiertos al público, informó Franceinfo.
El gobierno de Macron además concretó ayer el final de la gratuidad en las pruebas de coronavirus que no hayan sido prescriptas por un médico, en línea con lo que ya anunciaron otros países europeos que mantenían ofertas similares, como Alemania.
Donar y vacunar
Estados Unidos también rechazó el requerimiento de la OMS, al que calificó como “una elección falsa”, ya que, en palabras de la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, el país “puede hacer ambas cosas”, donar vacunas al extranjero y al mismo tiempo garantizar que todos sus ciudadanos reciban dosis extras.
En la misma línea, el Gobierno israelí inició la semana pasada la administración de terceras dosis a mayores de 60 años.
En un momento en que los países ricos occidentales se esfuerzan por vacunar a la mayor cantidad de sus poblaciones con dos dosis contra el coronavirus, Israel lanzó el viernes pasado una campaña a favor de una tercera dosis de la vacuna, principalmente de los laboratorios estadounidense-alemanes Pfizer-BioNech, para personas mayores de 60 años.
El presidente Isaac Herzog; Benjamin Netanyahu, líder de la oposición, y la madre del primer ministro, Nafatli Bennett, ya recibieron esta tercera dosis, que tiene como objetivo reforzar el sistema inmunológico frente a la variante Delta, que es más contagiosa que las otras.
En tanto, la Unión Europea (UE) mantiene abierta la puerta a que más naciones del bloque se sumen a Francia y a Alemania en el refuerzo de las inoculaciones, decisión que el bloque económico y político entiende que “corresponde a cada uno de los 27 estados miembro”.
“Como siempre, animamos a que estas decisiones estén basadas en las evidencias científicas y en línea con las recomendaciones de la Autoridad Europea del Medicamento (EMA)”, expresó la vocera de la Comisión Europea, Arianna Podesta.
Últimos pasos
Chile inició ayer la aplicación de una dosis de refuerzo contra el Covid-19 a los mayores de 55 años que completaron su esquema con el inmunizante chino Sinovac.
El presidente Sebastián Piñera, que presenció la vacunación de los primeros adultos mayores que recibieron la tercera dosis de AstraZeneca, señaló que “Chile fue uno de los primeros países del mundo y de Latinoamérica en iniciar un proceso de vacunación y ahora estamos en una etapa en la que tenemos que dar los últimos pasos’’.
Agregó que durante las próximas cuatro semanas se vacunará a unos dos millones de personas de 55 años y más y que en septiembre se inoculará a los menores de 55. A su vez aprovechó para convocar a 1,8 millones que aún no se inmunizaron.