Talleres. Medina en silencio, pero más calmo
“Su” Talleres pasó a cuartos de final y así igualó lo mejor que hizo en el torneo. El sueño de ser campeón motiva al entrenador.
Hugo García
Solamente la expresión de Alexander Medina iba a servir para medir la dimensión de su enojo por la salida sorpresiva de Federico Navarro (se fue al Chicago Fire de la MLS de Estados Unidos a cambio de cinco milloque nes de dólares brutos), un jugador insustituible individual y colectivamente para un Talleres que nuevamente veía acortado su plantel -sin previo aviso y con el doble frente en marcha-, con refuerzos que no llegaron a tiempo y otros por arribar.
¿Ese malestar sería realmente suficiente para replantear su continuidad antes de que venza su contrato? ¿el sueño podría alcanzar para tapar todo? ¿Quizás el disgusto podía ser un elemento para reclamar mejores condiciones a la hora de renovar y pedir que el aspecto deportivo sea prioridad de una vez por todas? ¿O ese enojo representaría un obstáculo insalvable para continuar más allá del 31 diciembre? Solamente, Medina lo sabe.
Lo cierto es que el Mundo Talleres veía con preocupación que realmente pudiera deteriorarse la fortaleza de la sociedad con Andrés Fassi, una de las más exitosas que se vieron en la era del presidente albiazul.
La “sangre llegaría al río” o nada ver, como había dicho el propio directivo, que entendía que Medina no estaría mejor en otro lado que en Talleres, que aún llegarán más refuerzos y que anhela su continuidad en
2022.
Lo cierto es que tras clasificar a cuartos de final al superar a Estudiantes de Río Cuarto por penales 65 (1-1 en el tiempo reglamentario), Medina mantuvo el silencio. Solo Carlos Auzqui alcanzó a decir: “Son rumores que llegan. Medina estaba enfocado en el partido ante Estudiantes de Río Cuarto y en San Lorenzo. Estamos contentos de que esté enfocado. Si se va, nos vamos todos, ja. Es el capitán de este gran barco. El capitán nunca se puede ir”.
Esta edición de la Copa Argentina es la más especial de todas para Medina. Es la chance más cercana de cumplir el sueño de obtener un título con Talleres: su contrato concluye en diciembre y no hay certezas sobre si seguirá en la “T”.
Son tres partidos para llegar a un logro que el fútbol de Córdoba no tiene, la clasificación a fase de grupos a Copa Libertadores 2022 y es lo que al uruguayo le quita el sueño. ¿Y el torneo de la Liga Profesional, no? Sin dudas, pero está más lejano y concluye cerquita del cierre de su vínculo.