“Pechito” López, héroe en su tierra
El piloto que triunfó en las 24 Horas de Le Mans fue aclamado en su regreso a Río Tercero
“Vamos, Pechito, todavía”, se escuchó en reiteradas oportunidades, mientras el piloto José María López recorría ayer las principales calles céntricas, de Río Tercero.
La llegada a su ciudad se registró después de ganar el domingo las 24 Horas de Le Mans y de convertirse en el segundo argentino en conseguirlo después de Froilán González, quien lo logró hace 67 años.
“Cada vez que lo pienso, no lo creo. El cuerpo se revoluciona. Es un sueño cumplido, lo máximo que tenía como meta en estos últimos años y alcanzarlo es increíble. Todo lo que significa Le Mans, como la carrera más importante y más dura del mundo; sumado al hecho de que hayan pasado tantos años desde que ganó Froilán y ser el segundo argentino… hay muchas cosas que poniéndolas juntas hacen que el momento sea más lindo aún. Cualquier deportista sueña con vivir algo así”, reconoció el cordobés en diálogo con Mundo D.
“Este triunfo justo ocurre a cuatro años de que Río Tercero, por una ley nacional, fuera declarada Capital Nacional del Deportista”, resaltó Javier Lunari, amigo del piloto, además de concejal. “Ganó la carrera más importante del mundo y ahora va por su título en el campeonato. Es un orgullo”, acotó Lunari.
El piloto cordobés permanecerá en Río Tercero cumpliendo la semana de aislamiento obligatoria en la casa de sus padres y la semana próxima probará en el Cabalén, antes de correr los 200 kilómetros de Buenos Aires, el 4 y 5 de septiembre.
“Es un orgullo mundial; hay que recordar que a los 12 años vivía solo en Europa”, compartió en medio de la caravana Omar Pisani, profesor de gimnasia que siguió muy de cerca la carrera del piloto.
Respecto al talento deportivo, Pisani opinó que “así se nace, después se perfecciona”. Los aplausos se escucharon a lo largo de toda el recorrido, que tuvo especial cuidado por la pandemia. “Es grandioso”, opinaba un vecino.
Mientras, la titular de Deportes del municipio, Rocío Comba, destacó que López “no tiene techo, siempre está en los podios de sus carreras”. Al mismo tiempo se esmeró es destacar que “no sólo es un gran deportista sino también es una gran persona”.
Comba reforzó: “Se nota su humildad, vuelve a sus raíces y siempre en los podios jamás duda de subirse con la Bandera argentina; es un abanderado que da mucho orgullo”.
Justamente, sobre el auto en el que se condujo, la Bandera argentina custodió su regreso a casa.
“Yo solamente soy alguien que trato de representar a mi Bandera. Representar al país es lo más lindo”, aseguró el piloto, quien emocionado además se reconoció un “privilegiado” por el triunfo que obtuvo el domingo a bordo del Toyota Nº 7 del Gazoo Racing en Le Sarthe, junto a Mike Conway y Kamui Kobayashi.
En la recorrida lo acompañó su familia, “los López”, que admitieron estar inflados de orgullo. Se sumaron también amigos que no se perdieron la posibilidad de ovacionarlo en vivo.
Las calles céntricas se colmaron de aplausos al paso de “Pechito”. “Me tienen mal acostumbrado, siempre me reciben muy bien, me hubiera gustado estar más con la gente si no hubiese pandemia”, reconoció.
Como testigo del recibimiento, en el asiento del acompañante viajó junto a “Pechito” el trofeo que demuestra que el domingo cumplió su sueño.