La Voz del Interior

Le prendió fuego tras un intento de violación

Lo denunció una mujer trans que lleva dos semanas internada en el Instituto del Quemado. Lo investiga la Justicia.

- Virginia Digón vdigon@lavozdelin­terior.com.ar

Julieta Abigail Urbano Charrás tiene 27 años y hace dos semanas que está internada en el Instituto del Quemado, de la ciudad de Córdoba, luego de que un hombre le prendiera luego tras intentar violarla, según ella denunció.

El hecho ocurrió el sábado 23 de abril, cuando –según la joven– un hombre la invitó a salir y fueron en colectivo hasta la casa de él aunque no pudo identifica­r de qué barrio se trataba. Allí él habría intentado violarla y como la joven se resistió, la roció con alcohol y la prendió fuego.

Desesperad­a, Julieta salió de la vivienda e intentó apagar las llamas. Fueron unos vecinos del lugar quienes la ayudaron y le tiraron agua.

“Si no fuera por ellos, no la cuento”, le dijo Julieta a un grupo de personas que se unieron para recaudar fondos y ayudarla.

Para ella no hay dudas de que fue un ataque de odio, un intento de transfemic­idio.

Para ayudarla

Desde la clínica se comunicaro­n con un grupo de mujeres y personas del colectivo LGBTIQ+ autoconvoc­adas que al enterarse lo que había ocurrido iniciaron una campaña de ayuda.

Gabriela Tomé es una de ellas. Se enteró porque una conocida compartió lo ocurrido con Julieta en un grupo de WhatsApp de trabajador­as feministas.

“Julieta necesita de todo, ropa, elementos de higiene y sobre todo va a necesitar ayuda cuando le den el alta, porque no tiene dónde vivir. Ella vivía con su mamá y sus 12 hermanos en una vivienda muy humilde y muchas veces estaba en situación de calle y nos preocupa esa situación”, explicó Gabriela en diálogo con La Voz.

“Nosotres estamos en comunicaci­ón permanente con ella. Le acercamos un celular para que se pudiera comunicar con su familia y además de llevarle cosas, tratamos de acompañarl­a emocionalm­ente, y vamos a visitarla al hospital”, agregó.

La mujer aseguró que Julieta ya está en sala común pero tiene quemaduras en su cuello, piernas y tórax y que entra al quirófano en forma frecuente, donde la van intervinie­ndo por la gravedad de las heridas. “Está muy dolorida, por eso prefiere hablar con los medios a través de nosotres”, aclaró Gabriela.

Julieta tiene miedo y pide justicia por el grave daño que le provocó el victimario. Por eso quiere difundir lo que le pasó con su nombre, e incluso con sus fotos, para dar cuenta de la gravedad del hecho y para generar conciencia sobre este tipo de ataques a personas trans.

Una causa judicial

La denuncia judicial fue tomada a Julieta en el mismo Instituto del Quemado. La causa quedó a cargo de la Fiscalía de Delitos Contra la Integridad Sexual de Segundo Turno de la ciudad de Córdoba.

Desde el Polo de la Mujer de Córdoba indicaron que el equipo de Violencias Extremas, junto al área de Diversidad del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, está abocado al caso.

El Ministerio de la Mujer confirmó también que se harán gestiones de ayudas económicas.

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LA VOZ/ARCHIVO INTERNADA. El Instituto del Quemado en Córdoba, centro especializ­ado.

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