Lo histórico y el precedente
Todavía resta saber si la condena a Amoedo se debe a un cambio definitivo en la mirada de los crímenes viales graves.
“Esto no termina acá”, se decían los integrantes del colectivo que viene bregando para que los crímenes viales se consideraran desde otra perspectiva. Haber conseguido que los homicidios cometidos por Alan Amoedo se vieran como producto del dolo eventual es hoy “una” sentencia que aún debe ser refrendada por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ).
Los fundamentos aún no se conocen y se ignora cómo razonaron los jueces de la Cámara 9ª del Crimen. La pregunta central es dilucidar si encontraron en este hecho de gravedad extrema motivos suficientes para plantear que Amoedo se representó la idea de que iba a matar y de que, por eso, merece esta condena.
La alternativa es que los vocales hayan aplicado un nuevo paradigma a la hora de evaluar hechos que antes no tenían esta consideración y que terminaban en una condena culposa.
Aun así, cualquiera sea de estas dos alternativas la indicada, la sentencia será casada por la defensa y el TSJ será el tribunal que deba dilucidar si el razonamiento de la cámara fue correcto. Entonces, surge la pregunta para comprender si el alto cuerpo confirma la sentencia al ver este caso como “diferente” o si, en cambio, lo analiza con un cambio de paradigma. Y, claro, queda la otra posibilidad: que el máximo tribunal se mantenga en lo suyo y vuelva a condenar el hecho como culposo.
Por eso, lo que viene en los próximos meses (o para el año próximo) es por demás interesante. Asistiremos a conocer la opinión de la Sala Penal del TSJ a fin de comprobar si, más allá de evaluar este caso como particular, cambió su mirada hacia nuevos paradigmas. O si insisten en lo anterior.
El fiscal Gustavo Arocena, que en su alegato criticó con dureza la “tradición” del TSJ, se mostró satisfecho luego de la sentencia que le dio la razón de que existe una (nueva) forma de ver el dolo eventual.
Al conocer el veredicto, el acusador manifestó: “Estamos contentos porque el fallo ha acogido nuestra pretensión. Y creo que se está sentando un precedente en el sentido de que en adelante los siniestros viales se analicen teniendo en cuenta la particularidad de cada caso, para ver que en algunos hechos estamos ante accidentes, en otros ante hechos imprudentes, pero en otros ante verdaderos hechos dolosos”.