Agua segura: fundamentos para la salud
El agua es un recurso vital, esencial para mantener la vida en nuestro planeta. Su acceso universal y equitativo es un componente crítico para la salud y el bienestar humano, especialmente en tiempos de crisis como la pandemia de Covid-19 que enfrentamos.
En este contexto, entender qué es el agua segura y cómo asegurar su disponibilidad y calidad es de suma importancia.
El agua segura se define como aquella que, gracias a su tratamiento y condición, está libre de microorganismos y sustancias tóxicas que podrían comprometer la salud humana.
En situaciones en las que el suministro de agua potable no está disponible, existen métodos efectivos para hacer que el agua no potable sea segura para el consumo: se incluye hervirla durante al menos 2 o 3 minutos o agregar dos gotas de lavandina por cada litro de agua, permitiendo luego un reposo de al menos 30 minutos antes de su consumo.
La lavandina utilizada debe indicar explícitamente en su etiqueta que es “apta para desinfectar agua”, evitando aquellas variantes que contienen aditivos o fragancias que podrían ser perjudiciales para la salud.
El uso del agua segura
El uso de agua segura es fundamental en diversas actividades diarias, que van desde beber y cocinar hasta lavar alimentos y utensilios. Esta práctica no solo ayuda a prevenir enfermedades diarreicas, sino que también puede prevenir enfermedades graves como el síndrome urémico hemolítico, causado por el consumo de agua contaminada.
Para garantizar la disponibilidad y calidad del agua segura, es importante seguir ciertas medidas de almacenamiento adecuadas. Debe guardarse en recipientes limpios y con tapa, preferiblemente de plástico, asegurando que no entre en contacto con superficies que puedan contaminarla.
Los depósitos de almacenamiento deben ubicarse en lugares seguros, lejos del suelo y fuera del alcance de animales, y deben limpiarse regularmente con lavandina y enjuagarse con agua potable antes de volver a llenarlos. Es crucial mantener los recipientes limpios y cambiar el agua regularmente para garantizar su calidad y seguridad.
Además del Día Mundial del Agua que se celebra cada 22 de marzo, en el ámbito nacional se estableció el 31 de marzo como el Día Nacional del Agua. El objetivo es el de fomentar una mayor conciencia sobre la importancia de velar por los recursos hídricos, su uso sostenible y su conservación.
Garantizar el acceso y uso seguro del agua es fundamental para proteger la salud y el bienestar de las comunidades en todo el mundo. A través de medidas simples pero efectivas, es posible asegurar que el agua que consumimos y utilizamos en nuestras actividades diarias sea segura y beneficiosa.