Cura cordobés va al Vaticano a reunión clave del Sínodo
El sacerdote Raúl Frega participará en un encuentro convocado por Francisco junto a 300 párrocos de alrededor del mundo.
El sacerdote riocuartense Raúl Frega viajará en los próximos días a Roma para participar, junto a dos curas argentinos más, del encuentro denominado “Párrocos para el Sínodo”, que fue convocado por el papa Francisco, y que contará con 300 religiosos de todo el mundo.
La originalidad de este evento en particular es darles voz a los clérigos que están en contacto cotidiano con la comunidad de fieles, conocidas como parroquias. “Desde las bases se palpa mejor lo ordinario y las realidades más profundas”, indicó Frega a La Voz.
A la espera de la cita de octubre, el Papa vio la necesidad de realizar una reunión intermedia para recoger la tarea de los sacerdotes que “están los territorios”.
El evento, previsto del 28 de abril al 2 de mayo, está organizado por la Secretaría General del Sínodo y el Dicasterio para el Clero, de acuerdo con los Dicasterios para la Evangelización y para las Iglesias Orientales.
La iniciativa responde a la indicación expresada por los participantes en la Primera Sesión de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos que en el informe de síntesis habían señalado la necesidad de “desarrollar vías para una participación más activa de diáconos, sacerdotes y obispos en el proceso sinodal durante el próximo año”. Una Iglesia sinodal no puede prescindir de sus voces, sus experiencias y su contribución”, apuntaron.
La primera sesión de octubre pasado incluyó a 464 participantes, entre ellos obispos, laicos y mujeres, quienes contaron con derecho a voto por primera vez.
El encuentro requerirá la implicación activa de los participantes con mesas de intercambio de buenas prácticas, talleres de propuestas pastorales, diálogo con expertos, celebraciones litúrgicas.
Los resultados de la reunión contribuirán a la redacción del Instrumentum laboris, el documento de trabajo para la segunda sesión de la Asamblea Sinodal en octubre próximo.
Escucha y trabajo en red
Para Frega esta invitación de Francisco recupera el modo de la Iglesia antigua, de los primeros siglos, “de caminar juntos, más discípulos, más horizontalidad”.
“La sinodalidad busca combatir los abusos de poder y de conciencia. Es un proceso donde todos podemos expresar. Quiebra los vicios de la dinámica institucional”, indicó.
Como delegado diocesano, Frega se reunió durante varios meses con diferentes actores de la sociedad civil para conocer sus necesidades y consultarles que visión de iglesia tenían. “Valoraron la instancia de diálogo. En muchas regiones de la Argentina aún se concibe a la Iglesia como una institución que nuclear intereses y anhelos”, sostuvo.
Para Frega, al frente de la comunidad de Espíritu Santo, los nuevos tiempos indican que el trabajo desde las parroquias debe apuntar a iniciar procesos y trabajar en red con los vecinos.
Junto a dos sacerdotes argentinos –de San Nicolás y Bahía Blanca– tendrán el desafío de plantear en la reunión mundial los desafíos y logros que observan en una Argentina diversa.
Frega indicó que en muchos casos se perdió el sentido de comunidad más profundo. “Debemos generar estructuras renovadas de acompañamiento. A veces existen grupos consolidados que no dan espacio a otros y es difícil integrar”.
Como puntos destacables, el cura sostuvo que el trabajo desde la caridad, la atención a las adicciones, la educación y la contención de personas mayores son prácticas que deben seguir fortaleciéndose.