Ante reclamos, otro presunto engaño
El ahorrista que denunció haberse quedado “sin nada” invirtió U$S 5 mil en X3 y, para poner paños fríos al reclamo, le ofrecieron un lote (como “garantía”) en Finca Diamante.
Luego aportó otros U$S 2.200 para “gastos”.
Pero cuando fue a una inmobiliaria para vender el lote y recuperar su capital, se anotició de que el proyecto no había comenzado a ejecutarse y que el boleto de compraventa no era tal, sino una solicitud de adhesión al fideicomiso. Es decir que volvió a ser engañado, según surge de la causa.
Otro damnificado firmó un boleto de un departamento de su esposa en Villa Carlos Paz a favor de Bertagna, quien le habría propuesto invertir el dinero en la web Intense Live (supuestamente dedicada a invertir en transporte de lujo en Bolivia y de Colombia), luego “migrada” a los portales Ellot y Royal Green (de la firma Alianza), todas “unidades de negocios” diseñadas presuntamente para estafar. El hijo de ese inversor tampoco recuperó U$S 1.500.
Uno de los inversionistas de Intense Live contó que él dejó de cobrar las ganancias y que su madre, que también había aportado dólares, se deprimió por la estafa y murió.
Bertagna fue captado en una escucha cuando se refirió a esas webs, incluyendo a ELO y Omega PRO: “Dejan de funcionar porque sabemos que todos esos ‘negocios’ tienen ‘vida útil’, que puede durar dos años, tres, cuatro, cinco... Las páginas se ‘cayeron’ todas”. También habría admitido una “adicción” a la gestión de este tipo de “proyectos” y la alta rentabilidad: entre U$S 5 mil y U$S 10 mil diarios.
En paralelo, Bertagna habría puesto en marcha un nuevo proyecto, “Club Internacional de Emprendedores”, similar a Aied, vinculado al ámbito educativo que habría planificado sus operaciones en Uruguay o en Estados Unidos para hacerse supuestamente de fondos de manera rápida.
Bertagna tenía acceso a dos cajas de seguridad en Hausler (en Córdoba) a nombre de su esposa, en las que descubrieron U$S 41.500, que habría provenido de las maniobras. La mujer figuraba con tres vehículos a su nombre y Bertagna, con uno, pero con numerosos bienes. A Alba Gutiérrez le descubrieron seis vehículos e inmuebles, según surge de la causa.
A su vez, Rodríguez habría ingresado dinero al país (presuntamente de las estafas de Finca Diamante) mediante criptomonedas que luego habría retirado de dos “cuevas”. Aunque fue apuntado como jefe de la banda, con Bertagna, la Cámara recalificó su rol como integrante.
Para la Fiscalía y el juez, los imputados habrían introducido el dinero obtenido en el mercado mediante compras de inmuebles y autos, para lograr darle una apariencia lícita. Algunos de los bienes los habrían colocado a nombre de terceros para continuar los ardides.
Para la Cámara, la acusación por intermediación y lavado fue muy imprecisa, por lo que la anuló. Pero la causa sumó nuevos procesados por asociación ilícita, Ferrer y Apiolaza, a partir de la denuncia de una mujer, lo que abrió otro expediente que luego se acumuló al original.
Dijo que vendió un auto para aportar U$S 11 mil por una oferta de Finca Diamante de tres terrenos a precio de dos, y que cuando se enteró de las posibles estafas, Ferrer y Apiolaza le dijeron que el proyecto estaba en pie y que continuara pagando en dólares.