El blanqueo que prepara el Gobierno abre una puerta al desarrollo inmobiliario
En la versión final del paquete fiscal que el gobierno de Milei envió al Congreso, que forma parte de la ley de bases, sobresale el blanqueo de dólares, algo que desde el sector desarrollista miran con optimismo.
El titular de Grupo Elyon y vicepresidente de Ceduc, Martín Teicher, sostiene que la depreciación que está sufriendo el dólar podría ser un factor determinante para quienes dudaban de sumarse al blanqueo.
“Con este blanqueo, soy muy optimista porque el dinero ahora sí se está derritiendo fuertemente. El modelo de negocio en este país era comprar dólares y guardarlos, y luego con eso comprabas cada vez más bienes. Antes, en Argentina, Venezuela y tal vez en otros países, el dólar se apreciaba y cada vez tenía más valor. Eso se acabó en los últimos 120 días. Ahora, el que tiene dólares guardados cada vez se preocupa más porque perdieron un poder adquisitivo enorme, por encima de un 70%. Además, entiendo que mucha gente se va volcar a blanquear porque este Gobierno está iniciando su gestión. Quizás si estuviera en su período final sería diferente”, recalca.
El empresario desarrollista recordó que en Argentina hay personas que guardan dólares “desde hace 20 o 30 años”. En este marco, previno que los bancos argentinos están aplicando muchas restricciones a la hora de aceptar los billetes estadounidenses. “Deberían aceptar dólares cara chica, cara grande, con una marca o con humedad porque se trata de un bien transaccional. Es como si a una persona en el desierto, que tiene sed, le ofrecés agua y te dice: ‘No, prefiero una gaseosa’. Así están todos los bancos, los públicos y los privados. Y hay que terminar con eso. El único dólar que no sirve es el falso o el de actividad ilícita”, señala.
Según el empresario, hay fuera del sistema formal unos U$S 200 mil millones. “Si ese monto se volcara al blanqueo, seguramente un porcentaje comenzaría a mover la construcción, la industria, se generaría inmediatamente trabajo, se mejoraría la oferta. Sería virtuoso en todos los sentidos”, previene.
“Hablando específicamente de la construcción, nosotros nos encontramos con un límite, con lo cual muchas operaciones inmobiliarias no se pueden hacer porque el cliente no tiene cómo justificar sus ingresos. Y las operaciones se caen”, agrega.
Teicher estima que si se vuelcan muchos dólares al blanqueo, los precios de los inmuebles subirán los precios de estos.
“Estábamos acostumbrados a vender a un sector muy pequeño de la población que pagaba de contado. Al haber crédito hipotecario y cuotas, eso implica que habrá una mejora en el precio de los inmuebles. Al igual que los alquileres, que los pulverizaron y ningún inversor quiso comprar un inmueble para ponerlo en alquiler”, sostiene.
“Soy optimista con el blanqueo. Muchos lo están esperando porque es barato y porque están perdiendo plata o poder de compra. Por eso, creo que puede ser una gran sorpresa en este momento”, concluye.