Series. Llegó “Dr. Death 2”, con mucha tela para cortar
La productora Ashley Michel Hoban y el actor y periodista Édgar Ramírez explican cómo fue el detrás de escena de la segunda temporada de esta ficción que ya está disponible en Flow y Universal+.
Así como en el mundo existen profesionales de la medicina con carreras intachables, existen algunos con una licencia para tachar de por vida. Así lo demuestra Dr. Death, el pódcast sobre crímenes reales de Wondery que, a raíz de su gran éxito, se convirtió en una serie audiovisual de dos temporadas cuyos capítulos ya están disponibles.
Cada temporada cuenta una historia real sobre médicos que realizaron malas praxis y se cobraron la vida de muchos pacientes. La primera parte se centra en la vida y obra de Christopher Duntsch (protagonizado por Joshua Jackson), el exneurocirujano estadounidense que fue apodado “Doctor Muerte” por los múltiples actos de negligencia médica que cometió en los hospitales donde trabajaba.
La segunda, que se estrenó recientemente en Argentina, revela las atrocidades que cometió el italiano Paolo Macchiarini (interpretado por el actor Edgar Ramírez) en diferentes países. Este profesional saltó a la fama y se ganó la confianza de la comunidad médica después de realizar el primer trasplante de órganos sintéticos en el mundo, pero a costa de la salud de pacientes críticos a quienes engañó para hacerles cirugías experimentales.
El objetivo detrás de la serie
En diálogo con La Voz, la productora Ashley Michel Hoban cuenta que, al igual que todo el equipo detrás de la serie, se siente muy emocionada al poder expandir este tema a nivel global y dar cuenta de que personas como Christopher o Paolo pueden estar delinquiendo en clínicas u hospitales.
“En lugar de saltar de estado en estado o de hospital en hospital, como lo hizo Christopher, Paolo Macchiarini saltó de país en país. Y es aún más difícil rastrear a nivel internacional cuando la medicina sale mal porque obviamente no tenemos un sistema médico global”, reconoce la estadounidense.
La productora sostiene que las primeras dos historias de Dr. Death están conectadas entre sí por ese sentimiento de poder absoluto, superioridad y egocentrismo que tuvieron los personajes como profesionales de la salud.
“Son muy diferentes entre sí. Christopher Duntsch estaba lidiando con algunos problemas de adicción que a su vez le ocasionaban otros problemas. Pero Paolo Macchiarini era en realidad un cirujano decente que desafortunadamente se dejó llevar por las posibilidades que le estaba dando su trabajo y no pudo enfrentar la realidad”, explica.
“Igual, siempre me gusta aclarar que, por cada Paolo Macchiarini, hay 100 buenos médicos trabajando. Lo que más nos emociona hacer como franquicia es proporcionar a los pacientes información práctica sobre el terreno para ayudarlos a ser su mejor abogado. Es la cosa más universal del mundo, todos nos enfermamos y debemos ir al médico. Así que estoy orgullosa de poder trabajar en este programa porque intentamos proporcionar información real para que la gente la use”, agrega.
Édgar Ramírez en Dr. Death
Por su parte, el actor Édgar Ramírez explica que hay series basadas en hechos reales cuyos personajes tienen un momento de introspección y explican las razones que los llevaron a cometer tales delitos. Como Paolo Macchiarini nunca tuvo ese momento de luz, para él presentó un doble desafío interpretarlo.
“Mi personaje jamás tuvo esa introspección y eso para mí fue muy interesante porque me dio la oportunidad de vivir la fantasía de vida que se había creado Paolo. Fue un desafío increíble para mí y adoro a Ashley (Michel Hoban) por eso. Siento que es uno de los detalles más interesantes que tiene esta serie. Para mí fue importante no juzgar a mi personaje porque soy yo quien está al servicio de él”, asegura en una rueda de prensa que organizó Universal+.
De igual manera, el actor (quien también es periodista especializado en política) reconoce que, como tal, la serie es una ficción y por ende “una reinvención de lo que fue la historia real”.
“No tiene intenciones de ser un documental ficcionalizado sobre cómo eran las vidas de estas personas. Aún así, el personaje que Ashley compuso fue muy convincente y me dio todo lo que necesitaba para construir y comprender al Paolo que creamos para el programa”, explica.
Y luego agrega: “Yo soy periodista, eso es lo que hacía antes de convertirme en actor. Me encanta investigar y profundizar lo más que pueda cuando encaro un personaje, pero en este caso sentí que el personaje era tan convincente en el guion que no necesitaba intentar entenderlo, copiarlo o inspirarme en el verdadero Paolo Macchiarini. Entonces, junto a todo este gran equipo que tenemos, quería simplemente crear nuestro propio viaje”.
Una historia de amor, dos grandes actores
Si bien esta nueva entrega de la serie se centra en las víctimas del médico italiano, también se retrata la historia de amor que vive Macchiarini con su exmujer Benita Alexander (interpretada por la actriz y cantante Mandy Moore), a quien se le atribuye en gran parte la caíreales da del médico. Ella fue quien inició la investigación en su contra porque desconfiaba de sus prácticas “milagrosas”.
“Esta increíble historia de amor nos dio una especie de entrada a la medicina para ayudarnos a entenderla. La relación de Benita con Paulo fue casi una alegoría de cómo él fue capaz de maniobrar a través del sistema médico tan fácilmente. Los primeros episodios se centran más en la historia de amor porque para nosotros es una forma de entender cómo él pudo manipular a las personas. Todo vuelve a los pacientes y esa es la parte más importante de la historia”, explica.
En línea con esto, la productora señala que trabajar con Édgar Ramírez y Mandy Moore fue “increíble” porque ambos llevaron a escena muchos detalles de sus personajes que no estaban preestablecidos en el guion.
“Edgar estaba en mi cabeza desde el principio. Cuando nos reunimos con el director Jennifer Morrison, antes de que intentáramos convencer al actor de hacer el programa, él insistió en que íbamos a tener que contar una historia tridimensional con Paolo. Y eso fue realmente importante porque no es solo verlo como si fuera el malo. Es un hombre que cruzó muchas líneas y justificó el cruzar esas líneas. Eso, para mí, era al menos un área gris que creo que valía la pena distinguir”, explica.
“Mandy tiene tanta presencia. Necesitábamos tener a alguien que pudiera estar a la altura de esa presencia. Y ella simplemente es increíble. Es una estrella de cine y tiene una verdadera amabilidad y calidez inherente en ella que creo que ayuda a entender lo que ella pasó y cómo alguien tan inteligente y divertido y astuto como Benita pudo terminar en esta situación. Te hace darte cuenta de que si le puede pasar a ella, le puede pasar a cualquiera”, añade.
Series basadas en hechos reales Dr. Death
El éxito de se enmarca en la ola de producciones sobre historias reales que hace tiempo vienen copando el cable y las plataformas de streaming.
Para Ashley, esa popularidad latente se debe, por un lado, al interés que tiene la gente por escuchar y contar historias, y por el otro, las oportunidades que tiene la ficción para narrar aquellos relatos de la realidad que “son aterradores”.
“Creo que nos ayuda a encontrar un sentido de control sobre lo que parecen sermomentosmuyincontrolablesynos ayuda a profundizar y tener una catarsis sobre algunas historias que son aterradoras. Nos ayuda a lidiar con ello. Y en el caso del Dr. Death, afortunadamente pudimos ofrecer información práctica real para los pacientes”, refuerza.