Mujeres actuales HISTORIAS REALES
Redactar estas palabras en una situación social tan compleja como la que vive nuestro país representa una gran dualidad. Por un lado y frente a la conocida crisis del papel que sufren los medios gráficos, es una enorme alegría que exista una nueva revista. Especialmente dedicada al mundo femenino y que asuma una voz comprometida frente a los problemas de género. Por otra parte, es duro escribir e investigar sobre discriminación, desigualdad laboral, violencia de género y muchas más batallas que aún tenemos por delante. En sintonía con esta realidad, una revista tan emblemática en el periodismo femenino como Marie Claire (fundada en 1937 en Francia) llega a la Argentina en el momento justo para transformarse en la voz de todas las mujeres tratando temas que a todas nos preocupan.
Quizás una de las notas más laboriosas haya sido la de femicidio, Tango Feroz, pág. 78, no sólo por la dureza del contenido sino porque la cruda realidad nos obligó a tener que actualizarla a diario hasta el cierre de la edición. Así es, mientras se terminaba el número, todos los días morían nuevas mujeres por violencia machista, sumando nuevas víctimas a la larga lista de nombres que publicamos. En nuestro país muere una mujer cada 28 horas por violencia de género. No lo debemos olvidar. Y nada parece poder detener esta pandemia.
Asimismo, nuestro compromiso es grande en cuanto al respeto por el planeta y la calidad de vida. En la nota “Los gritos del silencio”, pag. 68, entrevistamos a las biólogas y voluntarias que intentan salvar al cóndor, el ave sagrada de Latinoamérica de la extinción y nos conmovieron con su tarea y mensaje alentador. También llegamos a uno de los lugares más extremos de nuestro país, a la Puna jujeña, para compartir la labor de grupos de hilanderas, muchas madres solteras, que son sostén de familia y se ganan la vida procurando preservar las técnicas ancestrales de tejidos artesanales.
Tenemos un compendio de notas elegidas para acercar más a las mujeres entre sí, entre compatriotas, para compartir nuestras vivencias y sentirnos más cerca y más aunadas entre todas.
Otro gran sello distintivo es conectarnos también con los aspectos más placenteros de la vida. Para acompañar el cambio de temporada desplegamos una serie de producciones de moda con una dosis justa de sofisticación y originalidad, pero sin estridencias.
Ojalá que leer este primer número sea una experiencia tan gratificante como fue para nosotros realizarlo y que a lo largo de las páginas podamos comenzar a construir un vínculo indisoluble que nos lleve a encontrarnos hablando el mismo lenguaje todos los meses. Nos reencontramos en abril con más sorpresas y, por supuesto, con más realidad femenina.