Mi cocina verde
Ingredientes: 1 repollo blanco o violeta 1 zanahoria Sal marina.
La mayoría de las recetas de chucrut que encontramos en internet proponen una cocción a fuego lento con vinagre, pero la clave de esta receta es hacer un fermentado crudo con el repollo y la zanahoria. Uno de los grandes beneficios de los alimentos fermentados (en especial de las coles) es el de reestablecer el equilibrio entre los diferentes microorganismos que pueblan nuestro intestino: lactobacilius acidophilus, lactobacilus bifidus y lactobacilus plantarum porque la mayoria de ellos no sobreviven al llegar al estómago ya que es un medio muy ácido, pero los fermentados permiten pasar y poblar el intestino. La fermentación equivale a una predigestión de los alimentos. Vamos con nuestro chucrut: primero, separamos las hojas exteriores y, luego, cortamos el repollo blanco o violeta (nunca sabré por qué se lo llama colorado). Después, rallamos la zanahoria, la colocamos en un recipiente de vidrio grande, por capas, y vamos salando con la sal marina hasta completar el frasco. Cubrimos con las hojas exteriores del repollo que habíamos separado y dejamos fermentar a temperatura ambiente aproximadamente una semana. Una vez listo, podemos empezar a consumirlo, guardándolo en la heladera, con un tiempo de conservación de dos semanas.