El plato elegido por los millenials
Aunque se trata de un plato tradicional, hay una nueva generación que considera que, con los ingredientes adecuados, se puede transformar de simple a gourmet en un solo paso.
La mirada sobre la comida trasciende la necesidad de alimentarse: comer se convierte en una experiencia de disfrute y descubrimiento en sí misma, atravesada a su vez por las redes sociales. Según un estudio realizado por Knorr, 8 de cada 10 jóvenes encuestados coinciden en que si bien la sopa es un plato tradicional, cuando combina colores y sabores se convierte en un plato moderno y “tiene onda”.
De acuerdo a los resultados, el 70,3% de los jóvenes afirma que a la hora de comer lo más importante es que un plato sea sabroso y un 97% elije la sopa durante el invierno, después de las pastas.
Las razones del alto consumo de sopa están relacionadas con sus cualidades:
Ayuda a entrar en calor cuando hace frío. Constituye una forma saludable de comer vegetales. Es rica, práctica y fácil de preparar. Reconforta el cuerpo y el alma.
La sopa es un plato noble, de todos los días y apropiado para cualquier momento. “Las sopas permiten reunir en un solo plato distintos alimentos. Mientras más creativamente se la elabore o más alimentos la integren contribuirá al logro de uno de los conceptos básicos de la alimentación, que es que sea variada, lo que a su vez facilita la satisfacción de los requerimientos nutricionales”, explica la nutricionista Alejandra Luchetti Además, es un plato que permite explorar múltiples posibilidades según la ocasión, sus gustos y necesidades particulares. Tanto con las verduras de base como a través de toppings y otros ingredientes, la sopa puede transformarse en una opción gourmet.