Nada más dulce que la miel
Es un alimento de alto valor energético; posee mayor poder edulcorante que el azúcar con un 40% menos de calorías en iguales cantidades. Además, facilita la digestión y metabolización de otros alimentos.
La miel es un producto que ha utilizado el ser humano desde sus orígenes; forma parte de la dieta mediterránea desde la época de los egipcios cuando hacían sus expediciones y conservaban la carne en barriles llenos de miel. Su uso está muy bien relatado en los papiros encontrados; empleaban la miel, entre otras cosas, para uso cosmético en el tratamiento de llagas, cortes, quemaduras, y como alimento fortificante. También, fabricaban cerveza a partir de la miel fermentada y hasta el siglo XVI, que apareció el azúcar de caña, fue el único edulcorante conocido.
La miel se puede encontrar en diferentes estados físicos, aromas y sabores, una amplia gama de colores y tonalidades. Oscilan entre el blanco casi transparente, hasta las oscuras casi negras, la mayor parte presenta tonalidades ámbar, existiendo mieles rojizas, grisáceas y verdosas. El color oscuro no significa que sea de inferior calidad; por el contrario, se sabe que cuanto más oscura es la miel más rica es en fosfato de calcio y en hierro. La miel de color claro es más rica en vitamina A. Las oscuras son más ricas en vitaminas B y C.
Propiedades nutricionales:
Es un edulcorante totalmente natural. Es un alimento de alto poder energético que proporciona más de 304 kcal cada 100g.
Es de fácil asimilación debido a que posee hidratos de carbono de cadenas cortas. Es una fuente de energía rápida. Por tal motivo, mejora el rendimiento físico, especialmente, en los deportistas.
Facilita la digestión y metabolización de otros alimentos: en el caso de los niños facilita la metabolización de calcio y magnesio. No se recomienda su utilización en menores de 1 año porque podría contener esporas botulínicas, las cuales en el tracto gastrointestinal inmaduro del bebé se manifiestan como toxinas de esta enfermedad y puede llegar a ser potencialmente mortal.
Propiedades terapéuticas:
Es suavemente laxante (regulariza el funcionamiento intestinal). Es antiséptica.
Es antihemorrágica y cicatrizante. Estimula la formación de glóbulos rojos debido a la presencia de ácido fólico.
Estimula la formación de anticuerpos debido al ácido ascórbico, magnesio, cobre y zinc.
Es un aportante a la dieta de sustancias polifenólicas que tienen funciones antioxidantes y junto a algunas vitaminas y oligoelementos previenen el envejecimiento celular de los tejidos.
A algunas mieles se les atribuye poder analgésico y antiséptico pulmonar, expectorante.