EL Omeprazol bajo la lupa
Recursos naturales para bajar este químico que produce daños colaterales en el organismo.
El ardor estomacal es un problema cada vez más común entre una población bajo estrés y con desequilibrios en la alimentación. Por eso, el omeprazol se convirtió en una droga de uso habitual, al nivel del ibuprofeno.
Sin embargo, se ha comprobado que no solo el uso abusivo sino el extendido en el tiempo tiene consecuencias en la salud del organismo. Según la revista Journal of the American Medical Association, las personas que tomaron diariamente un medicamento del grupo de omeprazol durante dos o más años, tenían un 65% más de probabilidades de tener niveles bajos de vitamina B12 que quienes no habían ingerido estos fármacos durante un periodo tan prolongado. Aunque es raro, también puede producir disminución de los niveles de magnesio y calcio, especialmente en tratamientos largos y se ha asociado a un incremento del riesgo de fractura de cadera, muñeca o vertebral.
Vale la pena, entonces, ver qué recursos naturales tenemos a mano para aliviar el síntoma en el estómago y reducir la dosis de esta droga.
Vinagre de manzana
El reflujo ácido se produce cuando hay muy poco ácido en el estómago. El vinagre de manzana ayuda a mejorar el contenido de ácido y se puede tomar una cucharada disuelta en un vaso grande de agua al sentir el malestar.
Bicarbonato de sodio
Ayuda a neutralizar los ácidos del
El consumo habitual o prolongado del omeprazol baja los niveles de vitamina B12 y puede reducir el magnesio y el calcio.
estómago, sobre todo cuando existe esa sensación de quemazón producida por el reflujo ácido. Para esto, basta con disolver media cucharadita de bicarbonato de sodio en un vaso con agua y beberlo de inmediato. Su consumo de forma habitual no es recomendado, pero sí se puede beber en caso de que el dolor sea insoportable.
Jugo de aloe vera
Ayuda a reducir la inflamación estomacal y ésto puede contribuir al alivio de los síntomas del reflujo ácido.lo recomendado es beber media taza de jugo de aloe vera antes de cada comida. Eso sí, es muy importante dejar en claro que este jugo tiene un efecto laxante, por lo que no hay que excederse en su consumo.
Raíz de jengibre
Esta raíz tiene propiedades gastroprotectoras que ayudan a bloquear el ácido y a suprimir la bacteria Helicobacter pylori que causa la acidez. Se lo considera incluso superior al lansoprazol en lo que respecta a la prevención de la formación de úlceras: es hasta ocho veces más potente que el medicamento.
Para aprovechar sus propiedades, se recomienda preparar un té de jengibre añadiendo 2 o 3 rodajas de raíz en dos tazas de agua caliente. Después, se deja reposar y se bebe preferiblemente 20 minutos antes de cada comida.
Betaína
El suplemento de clorhídrico de betaína se puede adquirir en tiendas naturistas y dietéticas. Se puede consumir la cantidad necesaria para aliviar la sensación de ardor y, posteriormente, bajar la dosis. Ingerirla frecuentemente ayuda a que el organismo digiera mejor los alimentos y combate la bacteria.
Vitamina D
Juega un papel muy importante en el tratamiento de cualquier agente infeccioso. Para aumentar los niveles, lo recomendado es una exposición al sol apropiada. También se puede adquirir pero que será necesario aumentar el consumo de vitamina K2.
Infusión calmante
Mezclar una cucharadita de malvavisco, otra de manzanilla y otra de regaliz en una taza de agua recién hervida. El regaliz disminuye los ácidos del estómago y actúa como un antiinflamatorio natural. Se puede consumir 2 o 3 veces al día tras las comidas.
Comino
Usado como condimento, es otra forma eficaz de prevenir la acidez. También incluir en la dieta verduras, legumbres o especias aliadas del estómago como el comino, el hinojo o el clavo.