La primavera también los altera
No solo los humanos sufrimos alergias o enfermedades estacionales. Los perros y gatos tienen lo suyo. En esta nota te contamos los problemas más comunes que pueden enfrentar nuestros amigos de cuatro patas apenas comienza a subir la temperatura y cómo detectarlos.
Junto a septiembre y los días lindos llegan alergias, picaduras y parásitos a nuestros amigos de cuatro patas. Por esta razón, es importante tomar precauciones para evitar prevenirlas a tiempo.
Alergias
En primavera las mascotas pueden sufrir alergias por el polen, tal como los humanos. Los alergenos más comunes que las causan son los ácaros, el polvo y el pasto, que suelen estar en contacto directo con el cuerpo del animal.
Síntomas: tos, estornudos, lagrimeos constantes, inflamación de labios, intentos por rascarse la cara y lamerse las patas anteriores.
¿Qué hacer? Las alergias pueden ser muy delicadas, por lo que es necesario acudir al veterinario para que pueda realizar las pruebas, determinar el origen y asignarle un tratamiento adecuado.
Picaduras
Al subir las temperaturas y aumentar las lluvias, la actividad de los insectos se incrementa.
Síntomas: son múltiples. Lo más importante es estar alerta de posibles inflamaciones en la boca o la garganta del animal, ya que pueden generar graves insuficiencias respiratorias o incluso asfixia. ¿Qué hacer? Ante la presencia de alguno de estos síntomas, hay que acudir con urgencia al veterinario para que le aplique un antihistamínico adecuado.
Pulgas y garrapatas
Se trata, en ambos casos, de parásitos que se
alimentan de su sangre de los animales y pueden provocarles hemorragias y transmitirles distintas infecciones y enfermedades. Se encuentran principalmente en zonas con césped y arbustos. Las garrapatas, por ejemplo, también transmiten enfermedades a los humanos, por eso, lo mejor es prevenir.
¿Qué hacer? Tanto para perros como para gatos, existen antiparasitarios –champú, collares, pipetas- específicos para cada uno de ellos.
Aun así, la cantidad de pulgas que uno puede encontrar en los animales representa el 5 % de la infestación. El 95 % restante se encuentra en el ambiente, donde están los estadios inmaduros de pulgas, los huevos y las larvas que son difíciles de detectar.
Las espigas
En esta época crecen las llamadas "espigas". Cuando se secan se desprenden las semillas y es muy fácil que se les introduzcan a las mascotas por la nariz, ojos u oídos, provocando molestias, irritación y otitis.
Leishmaniasis
Se trata de una enfermedad parasitaria, transmitida por la picadura de pequeños insectos - conocidos como torito, plumilla o carachai- y que también puede afectar al hombre. Síntomas: el perro presenta una repentina pérdida de peso, caída del pelo alrededor de ojos y orejas, hemorragias nasales y diarreas, fatiga y poca actividad, seborrea escamosa y crecimiento de las uñas.
¿Qué hacer? ir rápidamente a un veterinario.
Para evitar enfermedades
Colocar un antiparasitario regularmente, cada 30 días.
Mantener limpios los lugares que habitan los animales. Aspirar alfombras, acolchados, zócalos y colchones.
Fumigar el ambiente con productos específicos que no resulten tóxicos para los animales. En el caso de las garrapatas, mantener bien corto el nivel del pasto en jardines y podar la vegetación. Mantenerlo libre de malezas, corrales y basura.
No arrancar las garrapatas de la piel de la mascota, ya que puede causar infecciones en la piel.
En casa, mantener siempre bien corto el nivel del pasto en jardines, dejarlo libre de malezas y podar la vegetación