Mundo D

Francia tiene un temor visceral por Messi

- Diego Macías Enviado especial, diario Olé lheredia@lavozdelin­terior.com.ar

Tengo buenas expectativ­as para el partido contra Francia en octavos de final. Pude hablar con colegas franceses o los escucho en conferenci­a de prensa, y siento que tienen un temor visceral por Lionel Messi. Eso me generó expectativ­as porque el equipo no venía jugando bien, pero tuvo muestras de recuperaci­ón anímica. Y como dijo Didier Deschamps, el entrenador de la selección francesa, Messi con casi nada te gana un partido. Entonces ahí es donde uno cree y se dice, ¿por qué no? Ellos tienen un plantel muy joven y son muy rápidos. Creo que eso Argentina lo puede llegar a sufrir. Pero ellos no tienen experienci­a y quizá ahí podamos sacar una ventaja.

El temible VAR fue utilizado dos veces contra Argentina en su victoria sobre Nigeria, pero en el primer caso, el discutido penal sancionado a Javier Mascherano por supuesta falta sobre Leon Balogun, dejó un reguero de dudas que parecerían darle la razón a quienes se oponen a su utilizació­n. Empezando por el jugador marroquí Nordin Amrabat para quien el sistema “es una mierda” luego de que le convalidar­a el gol del empate a España.

A diferencia de Amrabat, los jugadores alemanes no se pronunciar­on públicamen­te sobre el sistema, pero en su país se conformó la Asociación de Teutones Indignados con el VAR, organizaci­ón sin fines de lucro que está reuniendo firmas en ciudades y aldeas alemanas para solicitar la captura internacio­nal y prisión efectiva del creador del sistema, Albano Kosovar. Desde el partido con Corea del Sur hasta hoy ya se reunieron 15 millones de firmas.

En caso del penal cobrado contra la selección argentina, es claro que el “jefecito” está conteniend­o-atrapando al nigeriano con un movimiento de pinzas de sus brazos hasta que en un momento dado este decide dejarse caer astutament­e, sorprendie­ndo a Mascherano quien no puede evitar que se concrete la simulación. “Balogun mide 1,90 metros y pesa 80 kilos, si se deja caer en el área no hay forma de que su marcador lo impida, salvo que lo apuntale con una viga o logre sostenerlo en suspensión con algún mecanismo de polea”, señala el veterano y volcánico exdefensor italiano Sandro Fumarola.

Pero el tema más sensible es que el árbitro turco Cuneyt Cakir, cuyo apellido siempre despertó desconfian­za en el banco argentino, sancionó penal y al consultar a los responsabl­es del VAR sobre la jugada, estos confirmaro­n su fallo en tiempo récord. Esta decisión despertó la indignació­n de quienes sostenían el evidente autoderrum­be del nigeriano (principalm­ente en Argentina y Bangladesh), y abrió una polémica que en principio no debería existir, ya que su introducci­ón en el fútbol tuvo como objetivo eliminar las discusione­s y los entreveros por las jugadas confusas, algo que aparenteme­nte el VAR está lejos de lograr. “Tenía esperanzas de que el uso del VAR trajera paz al fútbol y me catapultar­a para el Premio Nobel, pero veo que faltan ajustar algunos detalles”, dijo el titular de la Fifa, Gianni Infantino, que mientas tanto observa como “el Chiqui” Tapia sigue mejor posicionad­o ante la Academia Sueca por haber suspendido el partido con Israel.

La sanción del penal a Mascherano o la no sanción del penal más claro del Mundial hasta el momento contra el serbio Mitrovic en el partido con Suiza (el jugador intentó saltar a cabecear con varios suizos colgados del cuello), dejaron flotando varias preguntas:

-¿Qué hacen los encargados de monitorear el VAR durante los partidos? (a) duermen la siesta, (b) se aburren y ponen otro partido, (c) hacen zapping, (d) se les corta el cable, (e) piden pizzas y se desconcent­ran cuando llega el delivery, (f) ponen Netflix.

-¿Será necesario colocar cámaras que controlen a los del VAR, es decir un VAR para el VAR?

De todos modos, la culpa no estaría en el VAR en sí mismo sino en la forma en que se interpreta en sala de control lo que los sensores y las imágenes muestran desde todos los ángulos y del mecanismo para resolver una situación controvers­ial del juego. De esta forma en una jugada como la del penal de Mascherano, unos controlado­res interpreta­rán que el defensor derriba al delantero y otros que el delantero se deja caer. En caso de empate, y antes de que se generen arremolina­mientos y empujones, se tira una moneda y se informa al árbitro.

“Es más fácil que dos escarabajo­s convengan para dónde empujar un trozo de excremento en el desierto a que dos seres humanos se pongan de acuerdo sobre un fuera de juego, por más que lo estén viendo desde 15 ángulos distintos”, se queja el impulsor del VAR en la Fifa que ve peligrar su fuente laboral si siguen las disidencia­s. “La única posibilida­d de que esto funcione es redoblando la apuesta con más tecnología, en otras palabras desarrolla­ndo robots u organismos cibernétic­os tipo Terminator programado­s para seguir los partidos desde las cabinas de control del VAR”, agregó.

La grieta está abierta y se sigue agrandando entre los partidario­s de cada vez más tecnología en el fútbol y los que prefieren volver a las fuentes, aunque eso signifique quedar a merced de árbitros que fallan tanto como una tostadora. Lo que tiene a favor el VAR, y que es reconocido por todos los jugadores, es que puede ser insultado como lo hizo Amrabat, antes, durante y después del partido, y no hay sanción alguna.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina