Navarro se reencontró con “el mejor Sebastián”
El volante es clave para Franco. Dueño de los ritmos del partido, explica las razones de su gran momento.
Sebastián Navarro los escuchó varias veces a los que decían que “estaba de vuelta”. Que “ya no era el mismo”. Las críticas fueron duras, porque ese volante central vistoso que supo jugar en la Primera División del fútbol argentino (y muy bien) acababa de firmar con Tristán Suárez, para jugar en la B Metropolitana.
El oriundo de El Bolsón, que se inició en la CAI de Comodoro Rivadavia, había tomado esa determinación en un momento clave de su carrera. A los 29 años. Un quiebre para cualquier jugador. Navarro eligió dar varios pasos para atrás y se metió en el barro para intentar desde ahí renacer, en la B Metro, donde nadie regala nada.
Los caminos del fútbol lo trajeron meses después hasta Alta Córdoba, también con muchas dudas pero bajo el ala de un técnico que lo conocía como Darío Franco (lo dirigió en Aldosivi).
El baño de aplausos con el que se retiró “Seba” Navarro del partido ante Mitre el pasado viernes sentencian una verdad: es un jugador del paladar del hincha de la Gloria.
Y parece que llevara mucho tiempo jugando en el club.
Navarro, que no partía como titular en la pretemporada, se ganó la “5” y es el dueño de los tiempos del Instituto de Franco. Maneja los hilos y los ritmos de juego.
“Siempre es bienvenido el aplauso. Pero acá lo más importante es el equipo. Sin mis compañeros yo no podría jugar de la manera en que lo hago. Más que nada estoy agradecido a ellos y al técnico. Estoy cómodo en el club, me han recibido 10 puntos. Eso me hace estar más tranquilo y feliz”, se sincera Navarro, con pasado en Talleres, Ferro y San Martín de San Juan.
“Lo hablaba con mi representante y mi familia... Siento, humildemente lo digo, que encontré al mejor Sebastián de los últimos años. Eso me pone contento. Es la confianza, es la edad, son los años de haber andado por muchos lados. Vengo de jugar la B Metro, que es algo que uno no lo quería, no lo imaginaba. Pero fui y traté de hacer lo mejor. Todo sirve de experiencia. Volver a esta categoría es importante y me gusta. Me siento muy bien”, contó ante Mundo D.
Ante Mitre, como ante Temperley, Instituto mostró una cara más guerrera, más batalladora. Algo que Navarro acepta.
“Entendimos de que a veces hay partidos que se tienen que ganar así. Necesitábamos buscar un ‘Plan B’ y por ahora se nos está dando. Esto es trabajo día a día y ojalá que sigamos así. Hay partidos que nos va a tocar jugar así, otros podremos imponer nuestra idea. Sabíamos que ganando dos partidos nos íbamos a acomodar”, agregó “Seba” y cerró: “Era injusto que tuviéramos tan pocos puntos por el nivel que teníamos. Esto recién empieza, pero el equipo tiene un gran compromiso. Hay que seguir por este camino”.