Una derrota que no complicó el plan
Talleres avanzó a cuartos de final pese a perder 1- 0 en su visita a Lanús. El equipo que dirige Alexander Medina enfrentará a Colón en Santa Fe en la próxima instancia. Mañana jugará por Sudamericana.
Lanús ganó 1- 0, pero terminó yéndose de su cancha con los brazos caídos. No se le dio l a combinación de resultados que necesitaba en otras canchas y no pudo pasar a los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional.
En cambio, Talleres perdió y el final en la Fortaleza granate fue con abrazos y sonrisas. La igualdad entre Colón y Unión en el clásico santafesino y l a victoria de Independiente sobre Huracán en Parque Patricios lo dejaron en el cuarto puesto del grupo B. Por eso, quedó entre l os ocho mejores y el próximo fin de semana visitará a Colón en Santa Fe, el primero del grupo A.
Para cumplir esta misión, Alexander Medina tomó una decisión razonable: a dos días del partido por l a Copa Sudamericana ante Deportes Tolima en el estadio Mario Kempes, decidió i r al Sur del Gran Buenos Aires acaso con l a formación más alternativa de todas las que últimamente haya armado. Y el equipo como tal se resintió.
El primer tiempo fue muy pobre como expresión colectiva y quedaron subrayadas las diferencias entre los que habitualmente comienzan en la cancha y los que van al banco. Sin cohesión defensiva, sin quite en el medio y sin profundidad, y con demasiado toqueteo i nexpresivo arriba, la “T” nunca pudo complicarlo a Lanús, que estaba en su misma frecuencia. Con calendario sobrecargado de viajes, partidos y rotaciones forzosas para repartir minutos y esfuerzos.
Un penal que el j uvenil Ignacio Lago le cometió al lateral Alexander Bernabei tras una pelota que él mismo perdió dentro del área y que José Sand anotó con enorme categoría puso al Granate en ventaja en el primer cuarto de hora. Y fue el corolario de una superioridad i ndiscutible. Lanús partió muy rápido desde el medio, fue más vertical y práctico y encontró espacios para correr y llamativas facilidades para ganar en lo alto del área albiazul. En cambio, Talleres se enredó en una posesión l enta e i mproductiva, sus volantes nunca se soltaron para pisar el área contraria y, demasiado solo arriba, Mateo Retegui nunca encontró por dónde pasar. Resultado: no se generaron situaciones de peligro.
Tuvo que mover el banco el “Cacique” Medina en el segundo tiempo para lavarle la cara a la inexpresividad de Talleres. Aparecieron tres de los titulares que seguramente estarán mañana ante los colombianos ( Diego Valoyes, Carlos Auzqui y Michael Santos) y, además, hubo un dibujo nuevo sobre la cancha. El 4- 2- 3- 1 en ataque mutó a un 4- 2- 1- 3 con Ortiz, Retegui ( luego Santos) y Valoyes arriba, más Auzqui por detrás de ellos. Talleres aprovechó el repliegue de Lanús y tuvo mucho más l a pelota ( 66% a 34 fue el cómputo final).
Pero situaciones claras tampoco se verificaron. Lo más riesgoso l l egó sobre el cierre: tras un fuerte foul fuera del área del arquero Morales a Valoyes ( el flojo árbitro Fernando Espinoza bien pudo haberle sacado la roja al guardavallas), Mac Allister estrelló su tiro libre en el travesaño.
A lo largo de toda la noche, Talleres nunca dejó de estar clasificado y, por eso, el Albiazul encaró el partido con calma. El objetivo era la clasificación y se consiguió sin grandes sobresaltos. Más como consecuencia de l o hecho antes que de lo que verdaderamente se produjo anoche. Ahora habrá que ir a Santa Fe a jugarse ante Colón la continuidad en la Copa de la Liga. Pero mañana l l ega Tolima al Kempes para otro desafío por la Sudamericana. La rueda del fútbol albiazul no se para nunca. Aunque a veces falten energías para sostener su giro.