Futuro
Los próximos Juegos Olímpicos seguirán llevando el nombre oficial Tokio 2020 a pesar de estar programados del 23 de julio al 8 de agosto de 2021. El avance del Covid-19 a lo largo y a lo ancho del planeta obligó al COI a atrasar un año los planes, pero con la promesa de que todo seguirá igual.
Los juegos de Tokio 1964 fueron históricos ya que era la primera vez que se llevaban a cabo en Asia; esta vez, 57 años después, se seguirán batiendo récords. Según los organizadores, los XXXII juegos serán “los más innovadores que se hayan organizado, basados en tres principios fundamentales para transformar el mundo: esforzarse por la mejor marca personal, aceptarse mutuamente en la diversidad y transmitir un legado para el futuro”. Este mensaje está representado por el logo, un círculo compuesto por rectángulos de diferentes tamaños que simboliza la unión entre países, formas de pensar y culturas.
Entre las novedades se encuentra la incorporación de cinco disciplinas adicionales a las 28 de siempre: Baseball/Softball, Karate, Skateboarding, Escalada deportiva y Surf. Por otro lado, con 165 eventos masculinos, 156 femeninos y 18 mixtos, Tokio 2020 está en camino de ser los Juegos Olímpicos con
mayor igualdad de género hasta el momento, con un 48,2% previsto de participación de mujeres. No podemos dejar de nombrar los íconos que identifican a las próximas Olimpíadas. Para empezar, la mascota olímpica: se llama Miraitowa, derivado de las palabras futuro (mirai) y eternidad (towa) en japonés. Su aspecto algo tradicional y algo futurista hace referencia a la unión de lo viejo y lo nuevo, lo clásico y lo innovador (y con esos ojos grandes y alargados recuerda un poco a los animé japoneses, sin duda). La selección de la mascota olímpica fue por concurso: miles de diseñadores se postularon y fueron los niños japoneses quienes eligieron al diseño ganador, creado por Ryo Taniguchi.
El diseño de la medalla olímpica también fue una competencia a través de Japón, en la que diseñadores profesionales y estudiantes tuvieron la posibilidad de presentar su idea. El ganador fue Junichi Kawanishi, Director de la Asociación Japan Sign Design y de la Sociedad Osaka Design.
La antorcha olímpica no es solo una tradición y un momento especial de preparación para los juegos, sino que también requiere de su preparación y diseño. Y claro que en esta edición hace referencia a la cultura japonesa: formada por cinco cilindros, la antorcha tiene forma de flor de cerezo típica de Japón, y las llamas nacen de cada uno de los pétalos. Entre las innovaciones tecnológicas debemos nombrar la sostenibilidad (utiliza desechos de aluminio de viviendas temporales construidas después del Gran Terremoto del Este de Japón) y la facilidad de uso para todos (peso y forma fáciles de agarrar y una marca de posición para ayudar a los portadores de la antorcha con discapacidad visual a identificar el frente). Así, refuerza el mensaje de unión, aliento mutuo y paz mundial bajo el lema “la esperanza ilumina nuestro camino”.