Dos siglos de la “espumante” innovación de Veuve Clicquot .
La casa francesa está celebrando los dos siglos del primer champagne rosado de ensamble. Un hito en la historia de los espumantes en el que fue clave una mujer.
La mundialmente reconocida casa de champagne francesa Veuve Clicquot eligió a la Argentina para celebrar los 200 años de la creación del Clicquot Rosé, la revolucionaria versión de los espumantes que creó Barbe-Nicole Ponsardin Clicquot y que fue la piedra fundamental de un camino basado en la tradición, en la creación y en la innovación.
Hoy, el encargado de continuar ese legado es Dominique Demarville, el décimo jefe de bodega de la
maison, ubicada en la zona de Reims, al noreste francés, donde se cultivan las uvas más distintivas que caracterizan al champagne.
“Estamos conmemorando los 200 años del primer champagne rosado de assemblage. En 1818, la mayoría de los champagne rosados se elaboraba adicionando un licor de frutos rojos que se encontraban en el bosque. A Madame Clicquot no le gustaba mucho el sabor de ese licor y en aquel año, según consta en nuestros registros, usó por primera vez un vino blanco y uno tinto para crear un
assemblage de rosado”, contó Demarville a LaVoz, en su primera visita a la Argentina.
La invención marcó un antes y un después en la vida de los distintivos espumantes franceses y consolidó el liderazgo de Madame Clicquot, quien con apenas 27 años se puso al frente de la casa de champagne tras el fallecimiento de su marido, François Clicquot.
“Actualmente en la región de champagne el 95 por ciento de los rosados se hace según este método. Eso demuestra que Madame Clicquot tuvo una idea genial. Creo que una de las grandes lecciones que tenemos que tener en cuenta es que se atrevió, que tuvo suficiente audacia para cambiar los hábitos y las costumbres”, elogió Demarville.
Para celebrar aquella innovación, el maestro bodeguero vino a la Argentina para convertirse en el anfitrión de una degustación de los vinos base que se utilizan para la elaboración del champagne y de los espumantes de Veuve Clicquot, entre los que destacan el Yellow Label, el Rich y el Extra Brut Extra Old.
El evento se realizó en la Maison Moët Hennessy, un palacio del estilo francés que perteneció a la familia de Alvear y que se encuentra en una de las zonas más exclusivas de la Ciudad de Buenos Aires.
Una de las particularidades que distingue a los champagne de Veuve Clicquot es que se elaboran con una colección única de vinos base, con hasta 18 años de antigüedad. Demarville contó que en su maison trabajan “con vinos que han llegado al máximo de su evolución” y “que no se encuentran en el mercado”.
“Siento que el trabajo con el champagne implica un respeto por nuestros antepasados. Las generaciones que nos precedieron nos legaron un sabor que tenemos que respetar y transmitir; es una de mis misiones principales para los próximos 10 años”, planteó.
Demarville destacó que los argentinos buscan sabores “intensos, ricos y generosos” al momento de elegir un champagne. “Ustedes tienen una gastronomía rica y generosa, y creo que el hecho de que Veuve Clicquot sea un champagne generoso, intenso, rico y potente, hace que su gusto plazca a los argentinos. Creo que es una de las razones por las que es el champagne número uno aquí”, agregó .
Veuve Cliqcuot está bajo el paraguas del grupo Moët HennessyLouis Viutton, que en Argentina es dueño de la bodega de Chandon en Mendoza. El grupo también tiene establecimientos en Brasil, California, Australia, China e India.
En Luján de Cuyo trabaja 1.500 hectáreas (450 son propias). En el país, el 33 por ciento de la producción total de Chardonnay y la mitad de la de Pinot Noir (cepas para espumantes) son de Chandon. La bodega está incorporando nuevos equipos de prensado de origen francés para preservar la calidad de las uvas en la cosecha. En la vendimia, la bodega elabora 500 vinos base.
Si bien hay un cambio de hábito en el consumo de bebidas, con caída en vinos y crecimiento en cervezas, la bodega asegura que Baron B se mantiene, mientras que Chandon ha redireccionado su estrategia para alinearse a las experiencias de los millennials.