Promotor de valor en el norte de la ciudad
Montó oficinas y viviendas “premium” en zonas nuevas para estos formatos. Ahora va por más.
Gastón Marchesini creció entre ladrillos y urbanizaciones, de manos de su padre, Luis, titular de Grupo Inarco, donde se inició como arquitecto y gerente.
Con esta experiencia, entendió que en el negocio desarrollista hay dos valores imprescindibles: cumplir con los compromisos asumidos y entender la calidad como una experiencia.
Cuando en 2013 armó su propia empresa, Gastón Marchesini Desarrollos Inmobiliarios, decidió aplicar lo aprendido en Inarco.
“Mi padre fue uno de los primeros desarrollistas en barrio General Paz. Con él aprendí qué es descubrir un área de la ciudad”, dice.
Por eso su primer paso fue crear Nepper Office Park, un complejo de 30 oficinas en Villa Belgrano. “Todos decían que era una locura. Pero cuando se inauguró estaba lleno y todavía hoy la demanda no para”, asegura.
Con esto probó que la zona norte ofrecía oportunidades para proyectos variados y de calidad. Por eso, no dudó en levantar Livette Chateau en un área olvidada por el desarrollismo.
“Un día miramos la ciudad desde el aire y concluimos que hacía falta algo diferente. Nadie imaginaba que en ese lugar entraban 12 mil metros cuadrados en 96 departamentos de alta gama”, explica.
Buscando nuevas zonas, halló una tierra al final de Recta Martinoli y allí levantó Suena Residencias, 43 departamentos cerca de los countries, de los cuales sólo quedan 12 libres.
Ahora estudia nuevas tierras para departamentos y oficinas. “Mientras sea más al norte, hay más mercado todavía. Buscamos donde nadie imagina que puede hacerse un proyecto inmobiliario, donde se puede irrumpir y aportar valor”, resalta Marchesini.
BUSCAMOS TIERRAS DONDE NADIE IMAGINA QUE PUEDE HACERSE UN PROYECTO, DONDE SE PUEDE IRRUMPIR Y APORTAR VALOR.