"La evasión no es prioridad"
Sostiene que reorientó la UIF para centrarla en casos de crimen organizado y corrupción.
Son
días de definición para el blanqueo de capitales. Preocupados por los parientes de funcionarios que la ley excluía del jubileo, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, decretaron el 30 de noviembre que abolían esa restricción. Bajo la órbita de Prat-Gay, el jefe de la Unidad de Información Financiera (UIF), Mariano Federici, recibió a NOTICIAS para contar su lucha contra el lavado de dinero. NOTICIAS: ¿Cambió la UIF? Mariano Federici: En la gran mayoría de los 40.000 reportes de operación sospechosa (ROS) que recibimos por año no se confirma el indicio de una actividad delictiva. Solo el 10% es considerado para abrir una actuación y solo el 1% termina en denuncia.
NOTICIAS: ¿Los ROS ya no se envían a otros organismos?
Federici: La manera de trabajar acá era contraria a los estándares internacionales. Se entregaban a la Procelac (Procuraduría de Criminalidad Económica) o a la Justicia los reportes e incluso la actuación interna. Nosotros recibimos el reporte, buscamos otros en la base de datos, los analizamos, buscamos en otras fuentes a las que se puede acceder ya que tenemos potestad para pedir información a todas las bases públicas y a cualquier empresa o persona. Además tenemos la posibilidad de pedir información a las UIF de otros países. Después producimos un informe, que entregamos a fiscales y jueces. ¿Por qué se trabaja así? Para proteger la fuente de información.
NOTICIAS: ¿Pero no se recorta así la tarea de la Procelac?
Federici: No, tienen nuestros informes…
NOTICIAS: Pero la Procelac antes accedía a todos los ROS.
Federici: Imaginate si vos sos un contador, tenés la obligación por ley de reportar a la UIF, pero la UIF revolea esa información a un fiscal o a un juez, que gatilla la apertura de una denuncia penal y ese reporte después es accesible a las partes, que puede ser un narcotraficante. Pensá en un escribano, un contador: si hace fama de reportante ante la UIF, probablemente pierda todos sus clientes.