Cambridge Analytica:
las huellas del escándalo informático que llegan hasta el macrismo. La película y el futuro documental sobre Argentina.
“Surgió un domicilio en Recoleta, se investigó y se verificaron la rendición de cuentas y no hubo resultados concluyentes. En caso de que haya sido en negro, no podemos comprobarlo”, aseguraron los auditores de la Cámara Nacional Electoral (CNE) que investigaron el caso.
El analista en big data Guillermo Vagni formó parte del equipo que comandó Marcos Peña en un búnker sobre la calle Balcarce en las elecciones de 2015. Consultado por el Equipo de Investigación sobre un eventual acuerdo con CA, Vagni aclaró: “No se usó, aunque sí ofrecieron este servicio, que no es tan fácil utilizarlos. Ellos dijeron que podían hacerlo, no con datos de Facebook, sino con datos propios. Para ese entonces, sabíamos que habían actuado de esta forma en la campaña de Trump”.
El rol de CA en la campaña presidencial de Estados Unidos en 2016 y en el Brexit de 2017 puso en vilo a la empresa por la manipulación de datos personales. “En retrospectiva parece inevitable la magnitud del escándalo debido a que el público descubrió que sus datos estaban siendo utilizados por la industria publicitaria”, reconoció Wheatland.
En un alto de sus clases en la prestigiosa universidad The New School de Nueva York, David Carroll, el profesor que también participó del documental de Netflix y aún lucha por la restitución de sus datos personales con lo que solía ser Cambridge Analytica, pide que haya “más investigaciones periodísticas y gubernamentales”. Para él, las chances de averiguar si finalmente Cambiemos utilizó los servicios de la compañía británica se acabaron y es tarde. “Si un ciudadano argentino hubiera hecho lo que yo hice antes de 2018 e hiciera una solicitud de datos a SCL en el Reino Unido, entonces podrían haber probado lo que yo descubrí. Ahora es demasiado tarde, porque las empresas cerraron y ya no tienen que responder a estas solicitudes”, explicó al Equipo de Investigación.
Para esta investigación también se contactó al codirector y productor del documental, el egipcio-americano Karim Amer, quien brindó un dato que demuestra que la trama local todavía tiene hilo para cortar: “Nos interesa hacer un documental sobre Argentina”.