Televisión sin tabúes:
Las novelas tratan temas de agenda social como la subrogación de vientre. Efecto cool.
Con la maternidad compartida entre cuatro mujeres y la subrogación de vientre como pilares de la historia, la nueva novela de Telefe se suma a la lista de series que, en el último tiempo, instalaron temas de la agenda social en el prime-time.
Cuatro mujeres que asumen la maternidad compartida de una beba nacida por subrogación de vientre. Con ese argumento como pilar de la historia, “Pequeña Victoria” (ver crítica página 14), la nueva novela de Telefe, deja atrás los típicos argumentos rosas que se emitían en el horario prime time e invita a reflexionar sobre las múltiples posibilidades que tiene hoy la familia. Incluso, va un paso más allá: quien donó el esperma -y quien terminará siendo una de las cuatro madres- es una mujer trans, interpretada por Mariana Genesio Peña. Atentas a lo que ocurre en la agenda social, estas producciones palpan las problemáticas que están en auge en un sector social y las retoman en la ficción. No es la primera vez que se pone en marcha este procedimiento. En una búsqueda por dejar atrás el conservadurismo de la televisión, en los últimos dos años se emitieron series que se animaron a tocar sin prejuicios temas antes tabú para la TV. “Las Estrellas” (El Trece, 2017) contó en un canal de aire una historia de amor lésbico y recreó el mundo de la prostitución con una nueva perspectiva: la mujer decidía hacerlo como trabajo que le permitía una retribución digna y no había proxenetas como intermediarios. Y el año pasado “100 días para enamorarse” (Telefe) fue furor por llevar a la pantalla la transexualidad, la autopercepción en la adolescencia, la militancia LGTBIQ y el aborto. Parece que es lo que la sociedad del 2019 quiere ver: estas dos novelas fueron un éxito de audiencia y se coronaron con varios premios. “Pequeña Victoria”, por ahora, se encamina hacia el mismo lugar: tuvo un pico de 17.2 puntos de rating en su estreno y los capítulos emitidos hasta ahora se emitieron como lo más visto del día, con un promedio de 15 puntos y por encima del clásico “Showmatch”. ROMPER ESQUEMAS. “Es completamente positivo que en un horario de prime time en la televisión, en uno de los canales con más vista, se toquen estos temas. Le da visibilidad a prácticas sociales que ya ocurren. Debatir acerca de qué papel tenemos las mujeres, las madres, qué pasa dentro de nuestras carreras laborales a partir de la maternidad es un debate sumamente positivo que hay que instalar porque ahí hay muchos mandatos en juego”, señala María Laura Giallorenzi, socióloga y becaria doctoral del CONICET especializada en estudios de género. Hasta hace algunos años el conflicto principal de los personajes femeninos en las novelas era superar barreras para lograr un romance idílico con un hombre. Hoy se redobla la apuesta y el planteo se complejiza mucho más. Julieta Díaz, quien interpreta a “Jazmín” da el puntapié de la historia con una controversia recurrente en la vida real pero que genera cuestionamientos: quiere ser madre pero sin transitar un embarazo porque pone en juego su éxito laboral. En la misma línea, nunca antes un personaje se había sentado frente a cámara para