Haz lo que digo...
El funcionario da consejos sobre salud pero no cuida bien la suya. Su historia clínica.
El
ministro encargado de insistir con la prevención y el cuidado de la salud de todos los argentinos, no atendió tan de cerca la propia: "Si me preguntás si me estoy cuidando todo lo que teóricamente sería necesario, me parece que no", confesó el propio Ginés González García un mes antes de llegar al sanatorio Otamendi con la mano izquierda paralizada. Desde que asumió, en la Casa Rosada lo ven cansado. La historia clínica del médico sanitarista de 74 años indica que es un paciente de riesgo no sólo por su edad, sino porque padece obesidad e hipertensión desde hace muchos años.
Igual que su amigo Alberto Fernández, un año atrás, Ginés no necesitó una ambulancia para arribar el 27 de mayo al Sanatorio Otamendi de Recoleta. El ministro de Salud llegó por sus propios medios a la clínica donde se atiende desde hace 30 años y al entrar avisó: “Se me durmió la mano izquierda”.
La visita disparó especulaciones sobre el posible contagio de Covid19 de Ginés, quien admitió que no se cuida del virus “todo lo que debería”. La primera explicación fue que tenía previsto realizarse un control de rutina por una cirugía realizada en 2019. Pero con el correr de las horas, la Casa Rosada confirmó que el ministro considerado “el mejor sanitarista del país” y reclutado por el Presidente para que Salud vuelva a ser Ministerio, debía quedar internado.
Estudios cardiológicos, neurológicos y traumatológicos mediante, Ginés pasó la tarde en el Otamendi con las cámaras de TV en la puerta. Y por la noche, explicó su situación: “La tomografía dio un hematoma subdural viejo".
HISTORIA CLÍNICA. Un hematoma subdural es una acumulación de sangre vieja localizada entre el cerebro y su capa exterior, provocada por un golpe o producto de la edad avanzada. Puede ser agudo o crónico, como lo fue para Cristina Kirchner, quien debió ser intervenida quirúrgicamente en 2013. Pero no en todos los casos se opera. A Ginés, le indicaron seguir con cuidados.
Hisopado por coronavirus, no hubo. “No me lo voy a hacer, no tiene sentido porque no tengo ningún síntoma”, explicó a El Trece desde su habitación.
En 2005, intentó modificar su sobrepeso con la colocación de un cinturón gástrico, pero el tratamiento no funcionó y Ginés tuvo que volver a los métodos naturales: comer sano y hacer ejercicio, dos tareas difíciles de cumplir durante una pandemia.
En la Casa Rosada ven su desgaste físico. La llegada del coronavirus lo tomó por sorpresa y por el ritmo de la situación, quedó afuera de la comunicación diaria. La tarea fue asumida por su segunda, Carla Vizzotti, quien podría hacerse cargo del Ministerio si Ginés necesitara dar un paso al costado c para cuidar su salud.
“Tengo riesgo aumentado, pero tod da mi vida me dediqué a esto y es un honor estar en un lugar como este y en este momento”, le dijo el ministro a Ernesto Tenembaum un mes antes d de su descompensación.