Ganadores de la limpieza
Por el coronavirus crece la demanda de artículos de higiene. El desafío de la cosmética.
Los
últimos cuatros meses, el mundo ha girado en torno a la pandemia y con ella ha ganado protagonismo la teoría del cisne negro, esa que, en pocas palabras, apunta a describir un suceso sorpresivo y de gran impacto socioeconómico. Si bien hay analistas que no encasillan al Covid-19 bajo esa metáfora, la del filósofo libanés Nassim Taleb se ajusta a lo que muchas empresas están atravesando: un panorama de incertidumbre y con números en rojo. Pero como todo, como el ying y el yang, como el ballet de “El lago de los cisnes” y sus protagonistas en blanco y negro, el del coronavirus es un escenario donde danzan no sólo amenazas, sino también oportunidades. Y es tras ellas, no sin desafíos y grandes esfuerzos, que se han lanzado las empresas de higiene y tocador para seguir creciendo, llegar a más clientes y ayudar a la comunidad.
“De acuerdo con lo decretado por el Gobierno, nuestra actividad quedó exceptuada del aislamiento y por eso en Unilever tenemos una gran responsabilidad ante la situación de emergencia sanitaria que estamos atravesando”, explica Laura Barnator, vicepresidenta de ventas de la empresa angloholandesa, compañía líder en productos de higiene y limpieza. “Todos los empleados continúan trabajando. Aquellos que pueden hacerlo de manera remota, lo hacen; los de planta, centros de distribución y puntos de venta continúan operando para garantizar el abastecimiento de productos de primera necesidad, exceptuados los grupos de riesgo”, agrega. Las mismas medidas tomaron en la empresa norteamericana Kimberly-Clark, otro de los grandes actores del sector que produce las marcas Scott, Kotex, Huggies, Kleenex, Plenitud y Poise.
Para las empresas habilitadas a seguir funcionando, el reto no radica en pensar cómo sobrevivir, sino cómo continuar produciendo en un entorno que demanda nuevos y estrictos controles para proteger a los trabajadores y la sociedad. En el gigante británico-neerlandés de consumo masivo con más de 90 años en el país aumentaron “considerablemente las medidas de prevención, seguridad e higiene”. “Entregamos kits compuestos por barbijos, guantes y alcohol en gel; implementamos controles de temperatura antes de ingresar a las plantas; establecimos distanciamiento social en espacios de trabajo; contamos con servicio médico en cada planta y centro de distribución; se suman números telefónicos y asistencia psicológica para repositores; además, se intensificaron las tareas de limpieza”, enumera Barnator, de Unilever, que produce las marcas Skip, Cif, Dove y Vim.
En Unilever están operando al 100%, aumentando la producción de aquellos artículos que están generando una demanda extraordinaria por el contexto. Y también hay ajustes por categoría: “Estamos adaptando algunas de nuestras líneas de shampoo para hacer jabón para las manos. También instalando capacidad para producir diferentes formatos de alcohol en gel”, cuenta la ejecutiva sobre uno de los insumos más demandados por el coronavirus. Y completa: “Además estamos adaptando las líneas productivas