Jugador de peso
El SUV de la marca japonesa se renovó para dar batalla en un segmento muy demandado.
Al Nissan Kicks se lo conoció como un auto concepto en el Salón de Sao Paulo de 2014 y después en el Salón de Buenos Aires de 2015 para posteriormente ser lanzado en el Salón de Buenos Aires de 2017. Desde ese momento se fue afianzando en el mercado argentino hasta ganar protagonismo y ser uno de los jugadores de peso del segmento.
Para Nissan es uno de los pilares del negocio local junto con la pick up Frontier ya que representa para la marca más del 38% de sus ventas. Ahora presento en la Argentina un importante rediseño aunque mantiene la mecánica y la mayoría de las versiones. La novedad es la versión Advance Plus , que se ubicará cómo tope de gama hasta la llegada del Exclusive, que lo hará en junio. El rediseño se centra en una nueva trompa, con cambios en ópticas, parrilla y paragolpes. Atrás, la mayor modificación es la unión entre ambas luces por medio de un aplique rojo. La motorización sigue siendo la 1.6 de 120 CV unido a una caja manual de cinco marchas o una automática CVT. La respuesta es satisfactoria aunque nos resultó chico el tanque de combustible.
La gama contempla desde la base seis airbags, y control de estabilidad, mientras que la versión full sumará frenado autónomo, alerta de cambio de carril y cámara 360 grados.
De tamaño compacto mide 4.3 metros de largo, 1.76 metros. de ancho y 1.60 metros. El interior tiene una buena calidad percibida, a pesar de que hay abundancia de plásticos duros. La posición de manejo para nuestro gusto es cómoda y el volante permite regularse en altura y profundidad. Los asientos son muy cómodos y atrás hay espacio aceptable para dos pasajeros adultos y un tercero eventual. El baúl es razonable (432 dm3).
Los precios de preventa son: Sense 2.150.000 pesos, Advance 2.260.100, Advance CVT 2.305.300 y Advance Plus CVT 2.426.500.
La Exclusive CVT, como dijimos, llegará en junio para completar la gama con un precio a confirmar.