Migrantes latinos:
La Corte Suprema estadounidense dio luz verde a los reclamos estatales para que Biden aplique las políticas de Trump.
la Corte Suprema estadounidense dio luz verde a los reclamos estatales para que Biden aplique las políticas de Trump.
Estados
Unidos está en alerta. Un número "sin precedentes" de migrantes intentan cruzar ilegalmente la frontera con México, según el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas.
“La situación en la frontera es uno de los desafíos más difíciles que enfrentamos. Es complicado, cambia e involucra a personas vulnerables en momentos de una pandemia mundial”, acentuó Mayorkas a los periodistas presentes en Brownsville, Texas.
Desde que asumió el cargo en enero, la administración Biden ha luchado para lidiar con un aumento en los arrestos fronterizos, que han alcanzado su máximo de las últimas dos décadas en los últimos meses.
Los agentes fronterizos estadounidenses realizaron en julio casi 200.000 arrestos de indocumentados en la frontera sur, el número más alto desde marzo de 2000, y representa “un aumento del 13% con respecto a junio”, marcó Mayorkas.
"El sistema que estamos usando está roto", remarcó Pete Sáenz, alcalde de Laredo, Texas, sobre el enfoque de la administración Biden. "Necesita ser arreglado", agregó.
LAS RAZONES. “El empeoramiento de las condiciones en los países de origen, incluida la pobreza, un aumento de la violencia y la corrupción, están detrás del aumento”, explicó Mayorkas. “Estos problemas se hicieron más agudos y difíciles debido a la pandemia y la administración anterior desmanteló nuestro sistema de asilo”, agregó. Joe Biden, que asumió el cargo hace unos siete meses, ha prometido revertir muchas de las políticas restrictivas de inmigración implementadas por su predecesor, el ex presidente Donald Trump.
El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, se ha reunido con funcionarios del gobierno mexicano para trabajar en conjunto para frenar los cruces.
Y la vicepresidenta Kamala Harris, quien fue nombrada por Biden para liderar los esfuerzos de la administración para detener las "causas fundamentales" de la migración desde Centroamérica, habló con el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, para enfatizar que el tema es "máxima prioridad"
CARAVANAS Y CRUCES El salto del muro de hierro y las largas filas de quienes llegan a México desde otros países, en aumento sostenido.
para Estados Unidos.
El presidente de México nuevamente eludió las preguntas sobre el restablecimiento de la política estadounidense de "Permanecer en México".
López Obrador apuntó que México seguirá ayudando a Estados Unidos y marcó que el problema de los migrantes ilegales "no puede durar para siempre". “Hemos tratado de mantener a los migrantes en albergues, sobre todo para proteger a los menores, a las mujeres”, dijo el presidente. "Pero esto no puede seguir, tenemos que llegar al fondo del problema y eso significa invertir en el desarrollo de los países pobres", indicó.
México insiste en tanto, que la mayoría de los solicitantes de asilo no son mexicanos, y provienen a su vez de otros países al Sur.
PROBLEMAS. Más allá de la voluntad de cooperación, México no quiere que un cierre de fronteras por parte de Estados Unidos lo complique internamente. México permitió que los no mexicanos fueran devueltos por la administración de Donald Trump, pero los funcionarios mexicanos insisten que no permitirían que esta política se reanude.
Al otro lado de la frontera, en tanto, la Corte Suprema de Estados Unidos se negó a bloquear un fallo de un tribunal inferior que ordenaba al gobierno del presidente Biden restablecer la política de la era Trump de obligar a las personas a esperar en México para audiencias sobre solicitudes de asilo.
Roberto Velasco, quien lleva las negociaciones por el lado mexicano, marcó que el fallo de la corte no es vinculante para México: “La política migratoria de México está diseñada y ejecutada de manera soberana". Pero López Obrador ya toma las previsiones para bloquear las caravanas de migrantes y deportar a los migrantes que intentan llegar a la frontera de Estados Unidos, antes de verse inundado por un endurecimiento de la política estadounidense marcado por los tribunales estatales. Según el fallo de la Corte, la administración debe hacer un "esfuerzo de buena fe" para reiniciar el programa que la administración Biden intentó cerrar.
Durante la presidencia de Trump, la política requería que decenas de miles de migrantes que buscaban asilo en Estados Unidos volvieran a México. Tenía la intención de desanimar a los solicitantes, pero los demócratas contestaron que les negaban a las personas el derecho legal a buscar protección en Estados Unidos.
Hoy los pueblos fronterizos están desbordados y las ONGs que colaboran con los refugios en la frontera norte de México, remarcan que están abarrotados y que los campamentos de tiendas de campaña para migrantes han vuelto a surgir.
En un su informe, la organización Human Rights First, con sede en Washington, registró 6.356 ataques violentos contra los migrantes en México desde enero, que incluyen violación, secuestro, extorsión, trata de personas y otras agresiones.
“ESTOS PROBLEMAS SE HICIERON MÁS AGUDOS DEBIDO A LA PANDEMIA Y A LA ADMINISTRACIÓN ANTERIOR".