El nombre del verdugo
El petiso Yago fue una pesadilla para los pibes argentinos.
En Brasil dicen que es el nuevo Isaiah Thomas por su parecido con el ahora jugador de Denver, que tuvo su gran temporada de fama en Boston.
Será porque los dos están 1m76 de talla, también por cierto parecido físico, la determinación para lo bueno y lo malo y hasta el liderazgo. Anoche, concretamente, el base suplente de Paulistano, que todavía no cumplió los 19 años, fue el verdugo de Argentina, especialmente en los tres primeros cuartos, cuando los brasileños terminaron de controlar el partido.
Yago Dos Santos, en el segundo cuarto -fatal para Argentina- clavó dos triples seguidos y un libre para sacar la primera ventaja grande, 39-21, a los 17m.
El equipo dirigido por Silvio Santander volvió a padecer los mismos problemas de las jornadas anteriores: pobre efectividad de cancha (al final maquilló un 42%), muchas pelotas perdidas (20), indecisiones en la conducción y poca fortaleza en el control del rebote (perdió 50-37 y le agarraron 14 en tablero propio).
Después del bajón del primer tiempo, Argentina mejoró en los tiros largos, Máximo Fjellerup empujó en ataque (10 puntos) y se emparejaron las acciones. De todas formas, los brasileños respondieron y mantuvieron su renta.
Yago volvió a protagonizar (terminó con 31, 6 rebotes y 5 asistencias), bien acompañado por el pivote Michael (11 tantos en el último parcial) y remató sin despeinarse.
Tras el día de descanso (hoy), mañana Argentina necesita vencer a Uruguay y el sábado a Paraguay para llegar a la definición, que sería ante Brasil, una revancha que ya da vueltas en la cabeza de los pibes.