LA MANO DE DIOS
Tyson, amigo de Maradona, amenazó con desempolvar los guantes al ver que Canelo atacó a Messi: “Si lo toca, tendré que volver al ring”.
Luego de ver la camiseta mexicana en el piso del vestuario argentino, Saúl Canelo Álvarez metió sus guantes en un pendrive y empezó a golpear virtualmente. “Que le pida a Dios que no me lo encuentre”, le tiró a Leo Messi en Twitter. “Tú también, cabrón. Me escribías ‘Ay, ay, Canelo’ y ahora estás mamando, no seas hipócrita”, atacó a un Kun Agüero que sólo había saltado a defender a su amigo. Contra los futbolistas, el boxeador azteca demostró guapeza. A ver si se anima a levantarle la voz a este muñeco: Mike Tyson, un histórico del ring con mucho cariño por la Albiceleste, le saltó a la yugular a Canelo por agarrársela con el 10.
“Alguien llamado ‘Canelo’ amenazó a Messi. Si él se atreve a tocarlo, tendré que volver al ring”, fue la granada que lanzó Tyson en BBO Sports. Y, ojo, que esa amenaza tranquilamente podría ser cierta: el ex boxeador de 56 años se calzó los guantes nuevamente en 2020 para enfrentarse a otro peso pesado de la época, Roy Jones Jr. Aunque el kilometraje sea alto, Mike probó que su pegada está intacta. Como lo hizo Diego pateando tiros libres en la concentración de Sudáfrica 2010...
Igualmente, este combate inesperado no sucederá. Canelo, arrepentido de sus palabras -incluso salieron a corregirlo compatriotas suyos-, les pidió disculpas a Leo y a todos los argentinos, aduciendo que “me dejé llevar por la pasión y el amor por mi país”. Y Leo, relajado después del triunfo argentino sobre Polonia que significó la clasificación a octavos, se refirió por primera vez al dilema que tuvo en vilo a todo Twitter -desde Cesc Fábregas hasta Pipo Gorosito-: “El que me conoce sabe que nunca le falto el respeto a nadie, es parte de un vestuario. No tengo que pedir perdón, ni le falté el respeto a la camiseta de México ni a nadie. Quedó ahí, no pasó nada”.
En cuanto a Tyson, ¡un capo! Porque bancando a Messi volvió a mostrarle al mundo su simpatía por Argentina. Ya lo había hecho poniéndose la casaca del Mundial 2006 para asistir a un juicio en San Pablo -entendió la pica con los brasileños a la perfección-, yendo al Luna Park para acompañar a Maradona en su último programa de La Noche del 10 (su foto alzando al Diego fue un clásico instantáneo) y, luego del fallecimiento del Pelusa, despidiéndolo a lo grande al asegurar que “fue mi héroe y mi amigo, será muy extrañado” y agregar que “solían compararnos, ambos fuimos campeones del mundo en 1986”. La mano de Dios sea contigo, Mike...