Olé

Cuando Lanús era más, Maximilian­o Comba metió un cabezazo débil, la pelota se le escurrió a Lucas Acosta y Gimnasia lo ganó en tiempo de descuento. El Grana tuvo un par claras pero se lució el arquero Durso. UN MAXI REGALO

- POR NICOLÁS MONTALÁ nmontala@ ole.com.ar

En los arcos estuvo la diferencia. En las distintas respuestas de sus ocupantes. La gran reacción de uno y el error -horror- del otro inclinó la balanza en el Bosque. Tomás Durso voló como un pájaro hacia su derecha y le tapó una tijera soberbia a Juan Cáceres para salvar a Gimnasia. Un ratito después, Maximilian­o Comba metió un cabezazo que no llevaba potencia. La pelota picó y se el escurrió a Lucas Acosta entre sus manos y una pierna. Ese blooper condenó al Granate, que ya no tuvo tiempo de reponerse. Y desató el festejo del Lobo, que llegó a su segunda victoria al hilo entre la Liga y la Copa Sudamerica­na.

La falla grosera de su arquero le cortó a Lanús una racha de seis encuentros sin caídas por toda competenci­a y lo privó de rescatar al menos un punto. Había sido superior el Granate en la segunda parte, con una circulació­n de pelota más aceitada y una mayor determinac­ión en ataque. Ya sobre la parte final del PT había crecido, esto traducido en el cara a cara de Troyansky con Durso, quien también se impuso. El equipo de Kudelka perdió, por lesión, a tres de sus titulares durante el partido (Lautaro Acosta, Braghieri y Aguirre), aunque se sobrepuso y logró ser más que GELP.

El Lobo había estado mejor plantado durante gran parte de la etapa inicial. Llegaba mucho y lastimaba, sobre todo por la banda izquierda con la presencia del atrevido y hábil Lescano. Eran avisos que no terminaba de concretar porque siempre aparecía algún defensor rival para despejar o el equipo de La Plata finalizaba mal las acciones.

El Granate levantó su producción y estuvo muy cerca de abrir el marcador con ese remate de Leandro Díaz que Morales, increíblem­ente, rechazó ¡de taco! sobre la línea para mandar la pelota al corner. En el mejor momento del visitante, cundo presionaba con autoridad y hacía méritos para llevarse el triunfo de La Plata, se quedó con las manos vacías. Y se alejó de la cima (ahora está a 12 de River). El Lobo, con muchos pibes, confió hasta el final en el triunfo. Y tuvo un regalito.

 ?? ?? EL LOBO LO GANÓ DE MANERA AGÓNICA.
EL LOBO LO GANÓ DE MANERA AGÓNICA.
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina