ESTO ES BOTIJAS
Cavani y Merentiel no sólo se entienden en la cancha: también hicieron amistad afuera. La Celeste, el mate, el Pinturillo, el ida y vuelta en redes y el apodo de uno para otro... Así es la relación entre la Bestia y el Matador.
Fue en agosto de 2023. No bien Edinson Cavani llegó a Boca con bombos y platillos, luego de una espera de varios años. En uno de los primeros entrenamientos, Miguel Ángel Merentiel no dudó en acercarse a su compatriota y, con la sencillez y humildad que lo caracteriza pero también con algo de nervios, le hizo una confesión que no suele ser normal en un mundo tan competitivo y celoso como lo es el fútbol: “Para nosotros sos un ídolo”. Inmediatamente eso dio inicio a una relación que se fue forjando al mismo tiempo dentro y fuera de la cancha.
Cavani y Merentiel andan juntos para todos lados y por la Copa Argentina se volvieron a reunir en el campo. Con una goleada 3-0 con goles de ambos. Pero, por sobre todas las cosas, con una buena onda entre ellos que quedó a la vista en las ganas del Matador de que la Bestia corte la sequía/maldición que había arrancado el 14 de abril cuando le quitó el gol a Zenón ante Central Córdoba. Buscándolo por de más, con pases hasta forzados cuando podía definir él mismo.
El mejor ejemplo de la solidaridad fue la jugada del 2-0 que terminó en tijera. Cuando Cavani recibió de
Blondel, quedó de frente al arco y eligió desprenderse de la pelota e intentar dejar a Merentiel de cara al gol. Pero el control fue malo y terminó con un centro que el experimentado goleador resolvió como en sus mejores épocas: con una pirueta espectacular.
Pero esto no es más que la situación inversa a la del semestre pasado y primeros partidos de este año. En los que Merentiel y todos querían que Cavani pudiera convertir y dejar atrás un comienzo sin goles. Por suerte, finalmente, la Bestia pudo meterla gracias a la gentileza de Luca Langoni, quien lo dejó solo para empujarla. Y el doble nueve xeneize llega on fire para el inicio de una seguidilla brava entre el tramo final de la Copa de la Liga y las primeras fechas de la Sudame
ricana.
La clave es que la dupla pegó buena onda de entrada. Merentiel, y también Saracchi, abrazaron a Cavani. “Me junto mucho con los uruguayos porque tenemos nuestras cositas, somos especiales, jaja”, contó la Bestia. Por la nacionalidad, por el mate y por un juego llamado Pinturillo
OTRO LAZO QUE LOS UNE: SON MUY QUERIDOS POR LOS HINCHAS.
que compartían en las concentraciones en el que uno dibuja y el resto trata de adivinar lo que es. Hasta que se aburrieron y pasaron a jugar juntos al truco contra Marcos Rojo, Darío Benedetto y Norberto Briasco. En las redes sociales también suelen jugar. Cavani bautizó como “Miguelón” a Merentiel en una historia de IG y le quedó ese apodo en las redes sociales, si de hecho el CM de Boca ahora lo suele llamar así. También suelen tener dialoguitos simpáticos a la vista de todos, como cuando el Matador publicó una linda foto definiendo en un entrenamiento ante la mirada de su compañero y escribió: “La Bestia me entrena”. Y al toque llegó la devolución de gentilezas en un comentario: “Vamos con todo hermano, máquina”.
Almirón fue el que los juntó primero en la cancha desde el primer día. Porque Merentiel venía siendo el goleador de Boca en 2023 y no daba para sacarlo por la llegada de una mega estrella del fútbol. Entonces la solución fue dejar el 4-3-3 y pasar el doble nueve en un 4-4-2 que llevó al equipo hasta la final de la Copa Libertadores. Con el gol a Palmeiras en la revancha en Brasil como mejor exponente de la sociedad.
Y este año, Martínez arrancó repitiendo la fórmula desde que recuperó a Cavani de la lesión que sufrió en noviembre ante Newell’s. Lo puso contra Platense, lo perdió por una contractura, lo recuperó ante Lanús y no lo sacó nunca más. Un buen superclásico, tres goles a Platense, uno a Racing y dos a Central Norte. Seis en los últimos cuatro partidos. Mientras que Merentiel aportó en los primeros partidos del ciclo ante Sarmiento, Tigre y Central Córdoba, y también con Central Norte. Diez goles de los 17 de Boca en este 2024.
“Tengo una competencia muy linda, la verdad que nos llevamos muy bien los tres con Edi y Benedetto. Tenemos una amistad muy buena, nos llevamos bien, y me pone contento cuando hace gol un compañero”, dijo semanas atrás Merentiel. Y en la misma línea habló Cavani tras su doblete en la Copa Argentina: “Acá no importa quién haga los goles, lo que importa es que Boca gane, que Boca regale alegrías a su gente y que nosotros nos podamos regalar triunfos, que para eso trabajamos. Hay un gran grupo, hay que seguir creciendo y metiéndole para que vengan buenos resultados”. Es la dupla goleadora que, más allá de alguna rotación por el trajín, encarará unas semanas decisivas. La dupla charrúa, la dupla celeste. Miguelón y su ídolo Edi. O la Bestia y el Matador.