Madres y padres organizados por la vuelta a clases
“Cerrar las escuelas durante la pandemia tiene un beneficio epidemiológico muy modesto y un costo social muy alto. El riesgo no es cero, pero sabemos por las experiencias en otros países que las escuelas con protocolos han sido lugares más seguros frente a la covid que otros espacios, como bares o gimnasios, que ya están abiertos en la Argentina. Las prioridades están dadas vuelta”, sostiene Victoria Baratta, doctora en Historia, investigadora del Conicet, docente y una de las organizadoras de “Padres Organizados”, una organización que nació en agosto del usualmente recibe en las redes sociales.
Los argumentados esgrimidos –“todo tiene un fundamento científico”, advierte ella– parten de la premisa de que, como el coronavirus no es especialmente letal en les niñes y el impacto de la trasmisión comunitaria del virus una vez que se abren las escuelas es muy bajo (basándose, supuestamente, en lo que pasó en los países europeos), el costo social de tener las escuelas cerradas es deen una serie de protocolos junto al gobierno nacional y de la Provincia de Buenos Aires, ya hubo un retorno a la presencialidad en varios distritos que tenían las condiciones sanitarias garantizadas. Nosotros queremos volver a la presencialidad, pero se deberá hacer de manera gradual y de acuerdo a lo que establezca la política sanitaria de Nación y Provincia”, medió, por otro lado, la secretaria adjunta de Suteba, Silvia Almazan.
“Nadie está conforme con la escuela remota, ni la familia, ni los chicos, ni los docentes. Los maestros somos animales de aula”. Becerra