Trump dijo que su juicio político es “ridículo”
El presidente de EE.UU. adujo ser víctima de una “caza de brujas” El magnate republicano se reunió con su vicepresidente Mike Pence, quien rechazaría el pedido de los demócratas para destituir a Trump invocando la 25ª Enmienda.
insurrección mortal”, la líder demócrata reiteró su ultimátum a Pence para que responda “en 24 horas” a la Cámara en caso de aprobarse la resolución.
Lo cierto es que el encuentro cara a cara entre Trump y Pence marcó un giro importante en su relación, tensa desde el convulso seis de enero. Pese a las presiones de Trump, el vice estadounidense manifestó ese mismo día a través de una carta que no impediría la validación en el Congreso de los resultados de la elección presidencial, desatando la furia del presidente y sus seguidores. Ahora todo parece haber vuelto a la normalidad.
Como muestra de la desorganización con la que se retira del gobierno la administración Trump, se conoció un informe interno del FBI que un día antes del asalto al Capitolio alertaba que un grupo de extremistas se preparaba para “desatar una guerra” en Washington. La información, revelada este martes por el Washington Post, contradice las declaraciones del jefe de la oficina en Washington del FBI, Steven D’Antuono, quien dijo el viernes que la agencia no tenía “ninguna indicación” de que hubiera nada planeado para el pasado seis de enero.
Sin embargo, la oficina del FBI en la cercana ciudad virginiana de Norfolk había advertido, en un informe aprobado para su publicación interna el cinco de enero, de los planes de manifestantes de ultraderecha que habían compartido incluso un mapa de los túneles del Capitolio. Una de las publicaciones en redes que la agencia de inteligencia incluyó en su informe advertía: “El Congreso tiene que escuchar cristales que se rompen, puertas que se abren a patadas y sangre derramada”.
Trump denunció el “error catastrófico” de las redes sociales Twitter y Facebook, que suspendieron su cuenta por “incitar a la violencia”.