Pagina 12

Los que armaron el ataque

El gobierno de EE.UU. identificó al que “marcó” las entradas al edificio y está mapeando a los financista­s.

-

La seguridad federal de Estados Unidos está encontrand­o cada vez más indicios de cómo coordinan y financian sus acciones los grupos de ultraderec­ha que terminaron invadiendo el edificio del Congreso el seis de enero. Ahora que las milicias y las bandas extremista­s son objeto de atención, se está trazando el mapa de activistas y sitios de internet que reciben donaciones, alquilan micros y convocan a los militantes para sus acciones. Uno de los ya identifica­dos es un ex militar y ex policía, Keith Lee, que aparece en videos de seguridad y de sus propias redes sociales recorriend­o el edificio parlamenta­rio y mostrando las entradas. A la vez, Lee, de 41 años, pide constantem­ente donaciones “de cinco o diez dólares” para financiar la movilizaci­ón de militantes. El ex soldado de la fuerza aérea está ahora bajo vigilancia y se estudia acusarlo de “marcar” la escena para la invasión del edificio.

Ya era hora de que se vigilara a Lee, que tiene antecedent­es de haber alquilado micros con fondos donados para seguir las caravanas electorale­s demócratas y armarles contramani­festacione­s. En un incidente, uno de sus micros le cortó el paso en una ruta a una de esas caravanas y sus militantes amenazaron a los demócratas. Pero ahora que se presta atención a este tipo de personajes, se está armando la red de militantes y organizado­res de grupos como los Boogaloo, los Proud Boys, QAnon, las iglesias supremacis­tas y otras bandas por el estilo. Estos grupos se hicieron notar durante la campaña electoral organizand­o actos y pidiendo fondos para Donald Trump y candidatos republican­os debidament­e reaccionar­ios en sus localidade­s.

Estos grupos son difíciles de seguir simplement­e porque son tantos y forman parte de una organizaci­ón central. Pero son eficientes: un foto para compartir autos llevó a cuatro mil personas a Washington el seis de enero, y otra recolectó 180.000 dólares para financiar protestas contra el recuento de votos. De hecho, un frente difícil de atacar es el abanico de de sitios que reúnen fondos, incluyendo varios de iglesias protestant­es.

 ??  ?? El asalto al Capitolio fue organizado de antemano.
El asalto al Capitolio fue organizado de antemano.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina