Opinión
Recientes publicaciones de la exdiputada nacional Elisa Carrió, insufladas por su megalómana desmesura, agitan un intento de desprestigio respecto de las medidas de protección adoptadas por el gobierno de la provincia de Formosa a consecuencia de la pandemia de la covid-19 y la necesidad de tutelar, como lo establece la resolución 1/2020 de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que dice que “… los derechos a la vida, a la salud y a la integridad de las personas…”