“Retórica agresiva y no constructiva”
El Kremlin rechazó las críticas de Biden
La exigencia del presi@dente
de Estados Unidos, Joe Biden, de liberar inmediatamente y sin condiciones al líder opositor ruso, Alexéi Navalni, fue vista como “agresiva y poco constructiva” en el Kremlin, según el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov (foto).”Lamentablemente, es una retórica muy agresiva y poco constructiva”, dijo Peskov a la prensa.
En declaraciones realizadas en el departamento de Estado, Biden adoptó este jueves ayer un tono más firme frente a Rusia que el que empleaba por su predecesor, el republicano Donald Trump.
Biden no anunció medidas concretas contra Moscú, pero lanzó numerosas advertencias y citó el caso del envenenamiento y encarcelamiento de Navalni. El mandatario estadounidense dijo que el mayor crítico del Kremlin, enviado esta semana a prisión por dos años y ocho meses, “debería ser liberado de inmediato y sin condiciones”.
Biden afirmó también que había transmitido a su par ruso, Vladimir Putin, que “los días en que EE. UU. se rendía ante las acciones agresivas de Rusia interfiriendo en las elecciones” estadounidenses, “ciberataques y envenenamiento de personas”, se han acabado. El portavoz del Kremlin señaló al respecto que Rusia no responderá a ese tipo de declaraciones, pero pese a todas las diferencias en las relaciones con EE.UU., confía “en la voluntad de los estadounidenses de continuar el diálogo” en asuntos de benefician a ambas partes.”Partimos de que pese a la enorme cantidad de discrepancias y distintos enfoques sobre asuntos clave, tenemos una base para el entendimiento”, indicó Peskov. La Justicia rusa envió este martes a prisión a Navalni al hacer efectiva una sentencia suspendida de 2014 en un juicio que fue calificado de arbitrario por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y muy criticado por varios países occidentales.
Durante el gobierno de Trump el presidente estadounidense había elogiado reiteradamente al líder ruso, al punto de enfrentar a sus propios servicios de inteligencia, que había acusado a putin de interferir en la elecciones del país norteamericano, cuestión que el exmandatario había descartado de plano.